Clientelismo y falsas promesas de políticos pausan planes de partidos en formación

Cuatro partidos políticos en formación se encuentran actualmente en la carrera por formalizar sus aspiraciones de convertirse en una agrupación política legalmente reconocida por el Tribunal Electoral (TE), con miras a participar en las elecciones generales de 2024.

Sin embargo, el camino recorrido y el que les queda aún por recorrer, no ha sido ni les será fácil, debido a una serie de obstáculos que aseguran tener en su andar por recoger firmas de adherentes, que frenan o complican sus aspiraciones.

El Frente Amplio por la Democracia (FAD), la Unión Nacional Independiente (UNI), el Movimiento Otro Camino y el Partido País; son los partidos en formación que luchan por llegar a la meta y competir en el torneo electoral de 2024.

De estos los más próximos a convertirse en partido político son el Partido País y el Movimiento Otro Camino.

El primero, liderado por el abogado José Alberto Álvarez, ya superó las firmas requeridas por ley (39,296 firmas) para constituirse en partido político y tiene previsto realizar su convención constitutiva el próximo 13 de mayo, uno de los últimos pasos que les exige la ley.

Mientras que, el Movimiento Otro Camino, liderado por el excandidato presidencial Ricardo Lombana, según el último informe de inscritos del Tribunal, para el primer trimestre de este año cuenta con 20,647 firmas de respaldo.

En tanto, el FAD, liderado por el dirigente obrero Saúl Méndez, apenas está en proceso de inscripción de iniciadores, y UNI con 13,050 adherentes se mantiene en este proceso de recolección de firmas de respaldo desde poco antes de las elecciones generales de 2019, sin poder lograr el objetivo deseado.

Pero, ¿qué les impide a estas agrupaciones políticas formalizar su sueño?

Para el fundador del Partido País, José Alberto Álvarez una de las dificultades para los partidos en formación ha sido no tener los libros móviles de inscripción debido a la pandemia de covid-19.

"Ahora es más difícil porque hay que llevar a los simpatizantes a firmar a las oficinas del Tribunal Electoral", dijo.

Y aunque el TE tiene la plataforma Tribunal Electoral Contigo para las inscripciones, según Álvarez, esta todavía no es amigable.

"A veces se forma una fila de espera que las personas se aburren y se salen y no terminan la inscripción. Eso dificulta el proceso de inscripción", aseguró.

Alejandra Chong, subsecretaria general del Comité Ejecutivo del FAD, coincide con Álvarez en que al no haber libros móviles se les complica aun más el proceso de recolección de firmas.

"Estamos familiarizándonos con esta metodología, con la plataforma Tribunal Contigo y la app biométrica. Pero no es fácil, porque depende si hay buen internet, del tiempo de espera; hay mucha dificultad para lo que es este proceso de inscripción", afirmó Chong.

Otra “traba” que indica haber tenido la dirigente del FAD para avanzar con el proceso de recolección de firmas, fue la exigencia de contar con la cuenta bancaria única de partidos en formación, lo que, señala, les tardó dos meses, en los cuales no tuvieron posibilidad de inscribir a nuevos adherentes.

"En febrero fue que logramos romper con esa dificultad que teníamos y es cuando se nos abren los libros", dijo.

De igual manera, según Chong, las discrepancias entre el número de inscritos por el TE y la cantidad que señala el FAD, es otro de los frenos que ha tenido la agrupación política. "El sistema sigue siendo un obstáculo", afirmó.

Para Álvarez otra muralla que tienen los partidos en formación en su afán de constituirse en partido político es el clientelismo y la falta de credibilidad de los partidos políticos tradicionales.

"Los partidos políticos por años han acostumbrado a los panameños a inscribirlos con base a promesas. Es un clientelismo con base a recursos, mucha gente no se inscribe porque no le dan", explicó.

Mientras que, la credibilidad de los políticos, de acuerdo con Álvarez, está en el suelo. "Lo que el pueblo ve es que los partidos y sus dirigentes se disputan cargos y no se ocupan de solucionar los problemas del país”.

Ricardo Lombana, líder del Movimiento Otro Camino, dijo estar seguro de que este año serán partido político, "uno moderno, transparente y respetuoso de la dignidad de todos los ciudadanos".

No obstante, para Lombana hay una infinidad de razones que han dificultado la inscripción.

Una de ellas, sostuvo, es lo difícil de inscribir por convicción a una ciudadanía acostumbrada a partidos clientelistas.

"El Movimiento Otro Camino no compra inscripciones. Si alguien pregunta "¿qué hay pa' mí?, los activistas pasan de largo. No daremos un centavo para comprar apoyo partidario", señaló.

El tema de la pandemia también ha influido mucho dijo Lombana.

"No hay libros móviles para hacer jornadas masivas de inscripción como se hacía antes, están prohibidas las multitudes y muchas personas no quieren ir al Tribunal Electoral por temor al contagio", expresó.

Lombana adicionó como otro obstáculo a las aspiraciones del movimiento, el hecho de que las herramientas tecnológicas implementadas por el TE para las inscripciones no son accesibles para gran cantidad de ciudadanos que no tienen internet. "La brecha digital está afectando nuestro proceso notablemente", señaló.