Las ranas de cristal son incluidas en el Apéndice II de CITES

Todas las especies de la familia la rana cristal (Centrolenidae) serán incluidas en el Apéndice II de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES). También se incluyó a la Agalychnis lémur (Rana Lemur) en el Apéndice II.

El Apéndice II es una lista de especies que ofrecen diferentes niveles y tipos de protección ante la explotación excesiva.

Casi el 50% de las especies de rana cristal evaluadas por la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) están amenazadas de extinción. Estas en su mayoría son afectadas por la pérdida de hábitat, el cambio climático, enfermedades infecciones emergentes y el comercio de mascotas exóticas, explicó el ministerio de Ambiente en una nota de presa.

La razón del peligro es porque las ranas de cristal tienen una alta demanda en el mercado internacional de mascotas debido a su piel transparente y su tamaño diminuto. “Estas características hacen que estas especies sean codiciadas por coleccionistas privados, vendedores y criaderos en todo el mundo”, detalló la entidad.

El jefe nacional de Biodiversidad del MiAmbiente, Erick Núñez explicó que se incluyó a toda la familia de la rana de cristal por la gran “similitud entre las especies, cuya diferenciación resulta un reto, incluso para los especialistas”.

“Por esto, esta inclusión total permitirá una mayor eficacia en la implementación de la enmienda, facilitaría el trabajo de unidades de la Autoridad Nacional de Aduanas y fiscales ambientales en el ejercicio de sus roles de fiscalización”, agregó.

La rana lemur se encuentra en categoría (CR) en peligro crítico, por ende esta enmienda es vital para reforzar su protección. “Como tal no existe evidencia, información o denuncias de que Panamá tenga o haya presentado reportes de tráfico ilegal de A. lémur, sin embargo, el interés de que la especie sea incluida en el Apéndice II de la CITES, se da porque se brindaría una mejor fiscalización y control ante posibles movimientos ilegales de anfibios”, puntualizó MiAmbiente.