Mulino prevé un aumento en el flujo irregular de venezolanos en Darién tras la victoria de Maduro

Panamá se estaría preparando para ver un aumento en el tránsito de migrantes irregulares venezolanos por la selva de Darién, en los próximos meses, como consecuencia de la victoria que logrará este domingo Nicolas Maduro.

“Nos toca a nosotros como país velar por el tema de la frontera, yo creo, y ojalá me equivoque que el flujo de venezolanos va a aumentar por razones evidentes y tenemos que ir adoptando las decisiones que correspondan para salvaguardar su vida e integridad y darle paso expedito a las personas que quieren emigrar hacia Estados Unidos”, comentó el presidente José Raúl Mulino este lunes 29 de julio.

Las declaraciones de Mulino se dan en un contexto en el que los venezolanos, hasta mayo de 2024, siguen siendo la nacionalidad con mayor movimiento irregular de 109,895 personas, que transitaron por la selva. Mientras que al cierre del 2023, esa cifra llegó a las 328,650 personas, según datos del Sistema Nacional de Migración.

Para frenar todo tipo de migración irregular por la selva de Darién, Panamá y Estados Unidos firmaron un memorándum de entendimiento para repatriar a migrantes que no cumplan con la documentación legal exigida.

La propuesta llega en un momento en que Panamá ha tenido que lidiar con emasivos grupos que llegan al centro de recepción temporal en Lajas Blancas, ubicado en la provincia de Darién.

Dicha recepción es la parada temporal que hacen varios de estas personas para buscar atención médica de primera necesidad, ya sea para mujeres embarazadas, niños, niñas y adolescentes, así como para la compra de servicios de telefonía o internet.

Por el momento, está a la expectativa de lo que puede desencadenar la decisión que tomó el Consejo Nacional Electoral de Venezuela en proclamar, en la noche de este domingo, a Maduro para un nuevo mandato presidencial tras obtener un 51,2% frente al 44,2% del aspirante opositor Edmundo González Urrutia.

En conferencia de prensa, Mulino reiteró el rechazo a los resultados electorales, al considerar que no son la “voz del pueblo venezolano”. En consecuencia confirmó que tomó la decisión de retirar al personal diplomático de ambos países, en un lapso de 72 horas, así como poner en suspenso la relación diplomática entre Panamá y Venezuela.

“Al país no le queda otra opción, ya que era eso o respaldar lo sucedido en Venezuela, por lo menos, este presidente no lo va a hacer”, contó.

El presidente espera que ambas decisiones sean enmarcadas y entendidas dentro de los parámetros del derecho internacional público, que es al final del camino, la única herramienta viable con la que cuentan países pequeños, como Panamá, para hacerse respetar en el foro de las Naciones Unidas.

Según el mandatario, esta medida sólo será eliminada hasta que se publique las actas electorales que consten los resultados electorales y la “voz del pueblo venezolano”.

Mientras tanto adelantó que Panamá solicitará una reunión con el Consejo de la Organización de los Estados Americanos para convocar a una consulta con los ministros exteriores para hablar sobre Venezuela. También dijo que apoyará cualquier iniciativa regional relacionada al tema.