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Actualizado
- 01/06/2024 00:00
Creado
- 31/05/2024 18:38
Un trabajo ‘de altura’ es el compromiso de los valerosos hombres, que con sus arneses, guantes, ropas livianas manga larga, cascos y botas, vigilan y mantienen las telecomunicaciones
En lo alto de la antena repetidora del cerro Alto del Higo (Las Minas, Herrera), a 997 metros sobre el nivel del mar, José Cerrud, un técnico de comunicaciones del Tribunal Electoral (TE), se aferraba a la telaraña de acero para resistir la ventisca. Con el cielo de techo, hombre y naturaleza medían fuerzas. Al final se impuso el coraje y la experiencia del torrero.
Cerrud, de 37 años, 15 dedicados al Departamento de Radio Comunicaciones, sonríe y se alegra al pisar tierra con su equipo de seguridad: arnés, guantes, ropa liviana manga larga, casco y botas. “Siempre me encomiendo a Dios. ¿Te imaginas el terror de un rayo a esa altura?”.
Cuando él y los otros técnicos dan mantenimiento a las antenas, tienen que subir los accesorios (herrajes, grilletes, equipos sensitivos, tuercas) con poleas. Por esa razón, agrega, “debemos estar saludables, sin estrés y libres de vértigo”.
En el último torneo electoral, y en todos los que se iniciaron en 1994, las antenas garantizaron la comunicación electoral a todo el país. Radio y Comunicaciones forma parte del Plan General de Elecciones (Plagel), que movilizó a 36 comisiones de trabajo y a las direcciones regionales para cumplir con el calendario electoral 2024.
Alto del Higo es la montaña insignia de la Reserva Forestal del Montuoso, punto más alto de la provincia de Herrera, conocido como “el pulmón de Azuero” por su gran biodiversidad.
Atalayas de la democracia
Téofilo Sánchez Reyes, jefe del departamento, indicó a La Estrella de Panamá que es primordial optimizar el sistema de comunicaciones VHF, que reproduce videos mediante señales de onda, similar a las de televisión.
El resto del equipo lo integran Itemar Peralta (subjefe); Yessenia Yadira Ducreux (secretaria); Sixto Alvarado (conductor) y los técnicos Ariel Castillo, José Cerrud, Santiago Henríquez, Jerónimo Santana y Diógenes Quintero.
Mediante el mantenimiento de las antenas se garantizó que todo el territorio nacional (10 provincias y las comarcas indígenas recibieran las señales de radio y la transmisión de todos los acontecimientos de la elección general del 5 de mayo de 2024.
Cada tres meses se da mantenimiento a las antenas de cerro Ticantiqui, en Guna Yala; Altos del Higo, en Las Minas de Herrera; y torre El Peñón, en Veraguas. Se mide la potencia de transmisión, se revisan los conectores, se reemplazan las baterías y paneles, se prueba la operatividad de la antena y se cambian accesorios.
Otros sitios en lista de mantenimiento son Volcán y Potrerillos (Chiriquí); el legendario Canajagua de Los Santos; Santa Rita y La Guaira (Colón): cerro Pirre y Altos del Cristo (Darién); cerro Ancón (Panamá); cerros Galera y Campana (Panamá Oeste).
“Todo el personal está certificado para hacer trabajos de altura; es una misión difícil porque, en ocasiones, la lluvia nos obliga a bajar de las torres a la carrera”, explicó Sánchez.
La milla extra
En sitios montañosos, como cerro Ticantiqui, en Guna Yala, se llega en lancha; por trillos inhóspitos, cruce por áreas fangosas, sectores selváticos y laderas peligrosas. Las tareas se complican cuando se transportan piezas pesadas para las tareas de mantenimiento.
Además de estos técnicos, la mística de trabajo y el sacrificio en áreas de difícil acceso incluye a personal de las regionales, cuando hacen giras de identificación ciudadana (registro civil, cedulación y organización electoral) a caballo, en bote, cayuco, lancha, avión, bicicleta, en zonas alejadas como: Kusapin (Bocas del Toro), Besikó (Chiriquí), Donoso, El Guásimo y Santa Cruz (Colón), quebrada del Rosario (Herrera), Hato Chamí (Chiriquí), Caimitillo (Panamá Centro), entre otros.
Al igual que los valerosos torreros, estos funcionarios desafían los enigmas de la montaña, los oleajes de las tormentas marinas, los peligros de la selva y de las zonas rojas metropolitanas, los ríos crecidos y demás peligros.
Teófilo Sánchez y el equipo admiten que nada es más reconfortante que servir a la democracia y a la patria. No solo en el TE, en las ciudades y todos los rincones de la República hay héroes anónimos dispuestos a dar la milla extra por Panamá.
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