Haydee Osorio: Es necesario divulgar planes de respuesta ante el fenómeno de El Niño

El pasado 8 de junio la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA, por sus siglas en inglés) informó que a finales de septiembre el fenómeno de El Niño podría pasar de moderado a fuerte. Lo que representa un aumento de las temperaturas de las aguas del Pacífico y con consecuencias variables en el mundo: desde sequías hasta intensas lluvias y ciclones.

En Panamá, el gobierno asignó $10 millones para el sector agropecuario ante la sequía extendida y el fenómeno de El Niño. Especialistas consideran que es necesario no solo destinar fondos, sino también establecer una política de planificación y divulgación, en caso de que la situación se vuelva extrema.

“Es importante tener planes a corto plazo que permitan al Estado preparar a todos los sectores para que estemos listos y aceptemos lo que nos proyectan”, señaló Haydeé Osorio, doctora en ingeniería agrícola y especialista en recursos hídricos en la agricultura.

La académica explicó que se debe informar a la población de las condiciones, incluso extremas, que podrían darse al entrar el fenómeno climático.

Esa planificación implicaría contemplar escenarios con diferentes intensidades de sequía, siguiendo planes de organismos que tienen décadas gestionando crisis de este tipo, como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, en inglés).

La docente de la Universidad Tecnológica de Panamá precisó que esa divulgación debe incluir una instrucción de las posibles complejidades con la seguridad hídrica de la gente. Es decir, que estén listos para posibles restricciones al acceso del agua y establecer mecanismos de racionamiento en caso de ser necesario.

La especialista también analizó la seguridad alimentaria y consideró que las autoridades deben contemplar el escenario de una posible disminución de la producción agrícola, lo que podría representar un desabastecimiento de productos agropecuarios en todo el país.

“Sugeriría capacitar a las personas, pero no es llevarlos a un salón de clases, sino informarles de lo que pueden hacer como ciudadanos para prepararse ante esta situación. Eso es lo que a nosotros como país nos hace falta”, indicó.

En cuanto a la polémica sobre las concesiones mineras en medio de la sequía que se vive en Panamá, sostuvo que se requieren mayores controles sobre estos proyectos que podrían representar una amenaza para las fuentes hídricas de la población.

A su juicio, no está bien que el gobierno otorgue una concesión y que el control no sea transparente. Las personas que viven alrededor del proyecto necesitan saber lo que ocurre diariamente.

Alegó que se requiere tener monitoreos en tiempo real para tener una verdadera fiscalización sobre la actividad minera.