Jamás olvidar

Hablar del 20 de diciembre de 1989 es sin lugar a dudas muy difícil, porque nuevamente se repitió la historia del 9 de enero de 1964 pero en grandes dimensiones, donde un ejército extranjero volvió a usurpar los derechos de los panameños en nuestro propio territorio.

¿Qué hubiera pensado el general Omar Torrijos Herrera de este atropello? Qué nuevo movimiento en la comunidad internacional hubiera ideado para que la memoria de todos aquellos panameños indefensos que perdieron la vida no quedara en vano, así como hiciera en el pasado logrando que esas tropas militares estadounidenses salieran de Panamá y recuperar nuestra soberanía.

Lo cierto es que tuvieron que transcurrir tres décadas para que se tomaran los correctivos necesarios y para que esta fecha fuera declarada Día de Duelo Nacional.

Durante todo este tiempo pasaron gobiernos del actual partido gobernante, pero nunca lograron tomar esta decisión que hace justicia en parte a los caídos en esa fecha.

Es de conocimiento de todos que, fueron muchos los panameños que murieron a manos de los militares estadounidenses. Fue una masacre. El ejército más poderoso del mundo probando sus armas de guerra en un pueblo indefenso. ¡Qué cobardía!

Aunque también se dieron bajas por parte de ellos, pero fue en menor escala en comparación con todo el susto que pasaron en aquella madrugada los moradores de El Chorrillo y el resto de las familias panameñas.

En la oscuridad, de pronto todo se volvió una nube de pólvora, la gente corría para todos lados, llamas por doquier, muertos en las calles, todo un caos, pero la pregunta es ¿era necesario llegar hasta ese punto? ¿se logró algún objetivo?

¿Hasta cuándo Panamá tendrá que vivir con este fantasma que se escuda en un tratado de Neutralidad y que bajo el pretexto de defender el Canal de Panamá cada vez que quieran pueden intervenir?

Aquel 20 de diciembre debe ser recordado por todos y tenemos la obligación de enseñarle a nuestras futuras generaciones lo ocurrido en esta fecha para que nunca más se vuelva a repetir tal patraña. Es por esto que hago también un llamado al Meduca para que contemos la historia tal cual a nuestros estudiantes.

Los panameños somos gente noble, honesta, que lucha por sus ideales, por sus derechos y ese amor a la Patria debe prevalecer en todos desde el más chico.

Con esto tampoco estoy defendiendo a los militares panameños quienes considero que también perdieron la cordura y el control cometiendo también muchos desaciertos en su actuar, pero considero que cada pueblo tiene el derecho de luchar por su democracia sin la intervención de otra nación, sea cual sea.

No es un tema de antiimperialismo, sino de defender los derechos que como pueblo soberano tenemos. Es por esto que escogemos nuestros gobernantes en las urnas y tenemos un sistema democrático para tal fin.

“No hay que olvidar la historia, para no volver a repetir los mismos errores”.

Panamá en su historia ha tenido magníficas relaciones con Estados Unidos, y actualmente es uno de sus socios comerciales más importantes, sin embargo, hay que darnos a respetar, aunque seamos un país pequeño, pero que despierta grandes intereses a nivel mundial.

Y Panamá no solo ha sido objeto de intervenciones militares, sino también de guerras comerciales.

Somos un país físicamente pequeño, pero grande y con majestuosas riquezas naturales, con un centro bancario internacional envidiable, un Canal que ofrece un servicio al comercio mundial y así son tantas cosas bellas que tenemos que cuidar para que ningún país extranjero quiera apropiarse de lo que con gran esfuerzo hemos logrado.

Nuestro reconocimiento al Presidente Laurentino Cortizo, gracias a su disposición por fin este año podremos pasar un 20 de diciembre en reflexión, en unidad, recordando a todos los fallecidos y haciendo un mea culpa de todo lo que ha ocurrido en nuestra historia para que nunca más se repita que una nación extranjera ultraje a nuestro pueblo y saber elegir a nuestros gobernantes.