Obispo de Nicaragua arrestado por la dictadura de Ortega y Murillo

El obispo de la Diócesis de Matagalpa, Nicaragua y también Delegado Apostólico de la Diócesis de Estelí Mons. Rolando Álvarez Lago junto a otros sacerdotes y algunos seminaristas fueron puesto bajo arresto domiciliario por la policía política de Nicaragua por órdenes del dictador Daniel Ortega.

Ortega, cuya "vicepresidenta" y esposa, Rosario Murillo, han desatado una horrenda persecución en Nicaragua contra todos aquellos que no comulguen con sus ideas. Estos dictadores son producto de la llamada "Revolución sandinista," que derrocó a la dinastía dictatorial de lo Somoza. La revolución jugó el papel que la Teología de la liberación jugó un papel importante en su propio seno. Religión y revolución se hicieron uno, los templos se convirtieron en espacios de vivos diálogos intelectuales, los barrios marginales en templos y los sacerdotes en guerrilleros comprometidos. Por primera vez desde hacía mucho tiempo, una sección humilde de la Iglesia fijó su objetivo en la salvación material de los pobres sobre la salvación espiritual. La revolución también fue religiosa. (Wikipedia, 2022).

La revolución sandinista fue la primera gran revolución latinoamericana donde los cristianos participaron en forma masiva, no sólo a nivel de base, sino en la propia conducción del proceso revolucionario, tanto en los barrios como en el campo y, en cierta medida, en la dirección del Frente Sandinista de Liberación Nacional.

Durante el primer período de gobierno sandinista se hizo una reforma agraria, se desarrolló una intensa alfabetización del pueblo que era un 50% analfabeta y se redujo la a analfabetización hasta un 13%.

El gobierno sandinista de Nicaragua sufrió la oposición de Estados Unidos. El imperio creó un movimiento guerrillero contra el gobierno sandinista de Nicaragua al que llamó los "contras". Este grupo guerrillero y la oposición de grupos en Nicaragua fueron los responsables de que Daniel Ortega perdiera las próximas elecciones frente a Violeta Chamorro, la viuda de Pedro Chamorro, quien fue dueño del diario opositor La Prensa y mandado asesinar por Ortega.

En 2018, Nicaragua fue escenario de multitudinarias manifestaciones en contra de su Gobierno y sus duras políticas. Desde entonces, el país ha estado aislado de la comunidad internacional. La dictadura de Ortega y Murillo reprendió a los protestantes causándole heridas y en no muy pocos casos la muerte.

En un viraje de 189 grados, Daniel Ortega abandonó la revolución sandinista. Su familia acumuló una fortuna colosal en negocios oscuros.. Daniel Ortega imprimió al FSLN una orientación que lo empujó gradualmente a la derecha la organización revolucionaria.

Las graves violaciones a los derechos humanos los ataques a templos, a sacerdotes y las campañas de desprestigio a que han sido sometidos algunos religiosos por “criticar mucho” han sido la orden del día provocadas por los Ortega y Murillo.

Bajo el actual gobierno de Ortega y Murillo han ocurrido graves violaciones a los derechos humanos ataques a templos, a sacerdotes y las campañas de desprestigio a que han sido sometidos algunos religiosos por “criticar mucho”. "Siempre ha habido asedio, persecución contra todos aquellos que levantamos nuestra voz para defender a este país”, sentenció el padre Edwin Román, uno de los sacerdotes más críticos del gobierno sandinista." (Hernández, Vallo, 2022).

Con el arresto del Obispo Álvarez, la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo en Nicaragua cavaron su propia tumba. La iglesia jugará el papel que le corresponde.