Doctor José Renán Esquivel: humanista

Dr. José Renán Esquivel (1925- 2010), hombre superior, humanista por excelencia, de reconocida trayectoria nacional e internacional, premiado por organismos internacionales de salud, profesional consagrado, padre ejemplar y amigo incondicional, de conducta intachable. Tuve la oportunidad de conocerlo personalmente en su casa de retiro, en Bajo Mono, Boquete, Chiriquí, Panamá, rápidamente entablamos una amistad, que me llevó muchas veces a visitarlo. Después de su retiro, su casa se constituyó en sitio de peregrinaje permanente por visitantes de diferentes latitudes del mundo, con el solo objetivo de conocer y dialogar con el filósofo.

El Dr. Esquivel inició su vida pública como médico, graduado en Brasil, México y Europa, para luego, en 1962, constituirse en el director general del Hospital del Niño, hasta 1990, cuando se acogió a su jubilación. En la década del 70, el general Torrijos le encarga la organización del nuevo Ministerio de Salud de Panamá, cuyo lema es “Salud igual para todos”, allí sienta las bases del nuevo ministerio e impulsa la creación de los comités de salud, y los comités de agua en toda la geografía nacional, que siempre han querido ser privatizado por el Idaan, pero los productores y campesinos se han empoderado de ellos y no se dejan arrebatar esa conquista, máxime ahora que el agua es considerada un derecho humano.

Siempre estuvo a favor de la medicina preventiva y como conferencista sorprende a los galenos mexicanos, cuando expresó “que a los hospitales van los fracasados de la salud”. Después de esa titánica tarea, renuncia como ministro, por una discrepancia con el general Torrijos por el nombramiento de un viceministro.

De regreso a la dirección del Hospital del Niño, del cual se ausentó por licencia, es nuevamente llamado, en esta ocasión, para ocupar la Dirección General de la Caja de Seguro Social, apenas llega, destapa un millonario defalco de un programa de viviendas. Aunque las autoridades del Gobierno trataron de ocultar el informe, ya este se encontraba en los medios de comunicación social. Hasta la fecha no se conoce la suerte de esa danza de millones, y si hubo algún detenido o procesado por peculado.

En 1988, es convocado a dirigir el Ministerio de Salud, gestión que quedó truncada por la invasión a Panamá. En ese tiempo, trató de ordenar el manejo administrativo de los servicios médicos. Ya jubilado, el Dr. Esquivel se dedicó, por años, a ofrecer los servicios médicos de manera gratuita en el Centro de Salud de Potrerillos, Dolega, un gesto digno de imitar por sus colegas.

La labor visionaria del Dr. Esquivel ha trascendido el tiempo y las fronteras, escribió muchos artículos científicos sobre temas de salud, también fue docente en la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá y candidato presidencial en 1984. En julio de 2004, lo visité en Bajo Mono, Boquete, acompañado del Dr. Gerardo Budowki, un científico de talla mundial, quien fue coautor del Sistema de Zonas de Vida. La verdad disfruté mucho la conversación de esos dos grandes filósofos. Posteriormente, por el 2010, el Consejo Académico de la Universidad Autónoma de Chiriquí acordó, por unanimidad, otorgarle el doctorado honoris causa que, por egoísmo y miopía política del rector de ese entonces, no le fue entregado, a pesar de haber sido aprobado.

Dr. José Renán Esquivel, cumpliste tu misión y se te recuerda con cariño, vives en el corazón del pueblo panameño, porque dejaste un legado genuino y desprendido, que bien podríamos llamarlo el doctor de los pobres.

Descansa en paz, amigo, porque tu espíritu ya se ha reunido con los dioses.