• 18/09/2008 02:00

Educación y docentes

Al parecer Cuba es el único país latinoamericano que logra la categoría I en todas las áreas y cursos estudiados. En el nivel II se sitú...

Al parecer Cuba es el único país latinoamericano que logra la categoría I en todas las áreas y cursos estudiados. En el nivel II se sitúan Chile, Costa Rica, México, Uruguay y el estado de Nuevo León. Con II y III aparecen Brasil y Argentina. En último lugar se ubican Ecuador, El Salvador, Nicaragua, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú y República Dominicana, menos de 100 puntos por debajo de la sumatoria regional. Así concluyó el Segundo Estudio Regional Comparativo y Explicativo —Serce— de la Unesco, presentado recientemente en la capital chilena.

El estudio fue preparado entre 2004 y 2008 por el Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad —Llece—, con el apoyo de la Unesco.

La gran incógnita: ¿El mal aprendizaje de los alumnos, tiene que ver con el pésimo desempeño del profesor en el aula? Algunos docentes se defienden y alegan que los estudiantes no se interesan por asuntos importantes, “ellos sólo piensan en música, moda y sexo”, aseguran. Con contadas excepciones el docente se encuentra con pequeños genios interesados en cosas profundas. Según la investigación, la calidad de la escuela es la principal causa de los logros cognitivos de los estudiantes. El resto es explicado en su mayor parte por las características socio-económicas de los estudiantes. Para los especialistas otro detalle a destacar es el hecho de que algunos profesores tienen una formación precaria, hacen doble jornada y ganan poco. Las dificultades les impiden a muchos ser buenos profesores.

En Panamá, por ejemplo, los programas de capacitación parecen haber fracasado, no responden a la realidad del educador. Si no se le suma el aditivo mejor salario, a quien más se capacite, difícilmente lograremos tener en las aulas profesores motivados y menos alumnos sobresalientes. Sumado a esto los actos de corrupción en los que se han visto envueltos algunos docentes, hecha abajo cualquier esfuerzo por mejorar la calidad de vida de los educadores, que pasó de la primera a la tercera categoría social.

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