Crónica de las reformas electorales

A partir de enero del 2015, se inició la ardua y comprometida labor de llevar a cabo la conformación de la Comisión Nacional de Reformas Electorales (CNRE), la cual de forma ininterrumpida llevó a cabo la gestión de discusiones permanentes para modificar el Código Electoral, cambios de sustancia que de alguna forma se cimentaran en equidad, transparencia y la tan importante rendición de cuentas en la praxis de la política desde la faceta esencial, desarrollo de primarias en los partidos políticos, distribución porcentual de los recursos para campañas políticas para los diferentes cargos de elección popular, tiempos de campañas, topes de donaciones privadas, forma de designación de los diputados en circuitos plurinominales, designación y obtención de curules para el Parlamento Centroamericano (Parlacen), fuero electoral, participación de la mujer, participación de los independientes desde el punto de vista de no estar inscritos en partidos políticos, porcentajes para la conformación de partidos políticos, porcentajes de aporte estatal para la campañas políticas, entre otros.

Es menester indicar que esta comisión está conformada por nueve miembros; cinco representantes de los partidos políticos legalmente constituidos y con existencia jurídica electoral vigente y cuatro representantes de ejes esenciales de la sociedad civil con voz y voto en la comisión, estos cuatro mencionados y comisionados representan a la Academia, Empresa Privada (Apede/CoNEP), Foro Ciudadano, representado por Justicia y Paz y Trabajadores (Conusi); los partidos políticos debidamente representados pudiendo indicar taxativamente al Partido Revolucionario Democrático, Cambio Democrático, Partido Panameñista, Partido Popular y Movimiento Liberal Republicano Nacional (Molirena); igualmente cabe mencionar que la comisión fue ampliada para permitir la mayor participación ciudadana posible en el periodo de discusión y elaboración con derecho a voz; participaron Partido FAD en formación, Asociación de Mujeres Políticas de Panamá, Defensoría del Pueblo, Poder Ejecutivo, representado por el Ministerio de la Presidencia, Fiscalía General Electoral, entre otros; las consultas y derecho de participación fueron amplios. Una vez finalizado el proyecto, fue presentado ante la Asamblea Nacional en enero de 2016.

Por ser un tema inherente a modificaciones del Código Electoral, es el Tribunal Electoral el responsable de coordinar la Comisión y de igual forma posee, por ordenamiento constitucional, la iniciativa legislativa, por tal, la entrega del proyecto ante la Asamblea Nacional. En la Comisión de Gobierno y Asuntos Constitucionales, en el mes enero de 2016, le correspondió al HD. Pedro Miguel González, presidente de la Comisión, llevar a cabo la gestión correspondiente de la discusión; se dieron cinco convocatorias para iniciarla en primer debate y fue infructuoso por carencia de quórum.

Finalizó el periodo legislativo correspondiente dando inicio al siguiente en julio 2016 bajo la presidencia del HD. Quibian Teribe Panay y fue hasta entonces que se dio el primer debate, siendo aprobadas con modificaciones presentadas por los diputados hasta octubre de 2016, por tal de inmediato se pasó a segundo debate ya siendo responsabilidad de agendar la discusión al presidente del Pleno, HD Rubén De León, vicepresidente, HD Luis Eduardo Quirós. Finalizó 2016 y no fue factible se iniciara la discusión en segundo debate.

Desde enero de 2017, año que decurre, nos encontramos como comisionados y Foro Ciudadano Pro Reformas Electorales en espera de que sean tomadas en consideración esencial para la discusión que ameritan y coadyuvar en la mejoría de nuestro sistema electoral y regulaciones, lo cual no ha sido posible aún, constando el proyecto de 165 artículos que deben ser arduamente discutidos y bajo la expectativa dirigida a disminución de elementos que han coadyuvado a la facilidad de posibles actos de corrupción mediante la praxis de la política, lo cual ha producido de forma conducente un desmedido desgaste de los partidos políticos que deben ser atendidos con prioridad por el mismo beneficio de salvaguardar nuestro sistema democrático y en vías de la transparencia y equidad de las políticas públicas a desarrollarse. Dependiendo de las mismas, así mismo serán nuestra decisión de selección de nuestro gobernante y representaciones mediante el voto o práctica del sufragio en el 2019.

Ya no es dable ni permisible que no sea observada como prioridad la discusión de la reformas al Código Electoral. Esperamos no más dilatación por parte de los padres y madres de la patria que, aunque conocemos su preocupación en los temas de obligatoria discusión, no es menos cierto que ya es necesidad de país ante la imperante carencia de credibilidad y disminución de los estándares de respeto hacia la clase política y de los que ejercen la administración pública.

Recordar siempre que Panamá es de todos y la corrupción es el camino seguro hacia la destrucción de la paz social política y económica de una nación.

CATEDRÁTICA Y JURISTA, MIEMBRO DE LA CNRE.