• 08/08/2024 00:00

Ciudad de Panamá, invadida y atiborrada

Las autoridades alcaldicias se deben reunir y en forma coordinada, fortalecer su respectivo ordenamiento territorial. Ejecutar planes urbanísticos locales para que los residentes tengan trabajo, escuelas, clínicas de salud, recreación, servicios de agua potable, electricidad confiable, transporte público confiable [...]

El alcalde Enrique Peñalosa de Bogotá (8 millones de personas), dijo que la ciudad avanzada no es en la que los pobres tienen auto propio, sino en la que los ricos utilizan el transporte público.

La ciudad de Panamá es invadida por más de 80 mil vehículos privados que entran y salen seis días a la semana de poblados al oeste, al norte y al este. Urbanistas me aseguran que esa cifra no es exagerada. Los ciudadanos viajan, todos los días, por 4-5 horas entre sus residencias y lugar de trabajo y escuelas.

Lo cotidiano en la ciudad de Panamá son tranques vehiculares, sonadera de bocina, conducción a velocidades incautas, colisiones, autos mal estacionados, irrespeto a las señales de tránsito. La ciudad de Panamá está atiborrada. ¡Esa cantidad de vehículos en la ciudad solo causan caos y frustración! Es similar a tratar de llenar un tanque de agua que ya está lleno de agua. El agua se pierde, mucho tiempo se pierde.

El presidente Varela atendió, sin éxito, la viajadera de ciudadanos entre las ciudades de Arraiján y Chorrera hacia la ciudad de Panamá. Se pensó que un ‘puente nuevo’ resolvería, pero le faltó fondos o se le acabó el tiempo.

El presidente Cortizo retomó el ‘problema’. El ministerio de Obras Públicas (MOP) invitó a los ciudadanos de las áreas revertidas del Canal para informales sobre lo pesado de la viajadera vehicular, entrando y saliendo de la ciudad de Panamá, sobre la necesidad de un ‘nuevo puente’.

Se realizó una reunión entre los constructores del puente y los residentes Áreas revertidas. No acudieron empleados del MOP. Los constructores informaron que se construiría un 4º Puente sobre el Canal para ‘reducir el tiempo’ de la agobiante viajadera. Este puente les serviría a automóviles, buses y el metro. Además, el puente tendría un restaurante y un mirador.

Los de las comunidades residenciales reaccionaron. ¿Cuántos autos usarían el puente? ¿Por qué un restaurante y un mirador? Hasta la fecha, cinco años después de la primera reunión, no hay información sobre el número de autos que cruzarían el 4º puente. Separaron el metro de los vehículos y buses, creando dos proyectos independientes, supuestamente porque juntos el proyecto sería muy caro: este argumento no tiene sentido. Referente al restaurante y al mirador, decidieron eliminarlos para ‘crear ahorros”. En general, falta de seriedad.

El propuesto 4º Puente sobre el Canal sería el tercer puente entre la ciudad de Panamá y las comunidades hacia el oeste. El primer puente nacional fue el Puente de las Américas y el segundo fue el puente Centenario. Anotamos que el tercer puente hacia el oeste, no les serviría a los vehículos que vienen del este: Tocumen y Chepo; ni a los que vienen del norte: Colón y la carretera transístmica. La viajadera agobiante del este seguirá igual. Pero nada de esto importa, ya que la ciudad de Panamá está muy ‘enferma’. Por ende, más carros cada día solamente acentuaría su mal servicio a la ciudadanía, y hasta su colapso.

Los constructores del 4º puente, sin presencia del MOP, se reunieron como tres veces con los residentes de las Áreas revertidas, La Boca, Balboa, Albrook, Cárdenas, Curundú, etc. Según entendemos no hubo reunión ni consulta ciudadana con los ciudadanos de Arraiján y Chorrera.

En estas reuniones nunca vimos a personas de las autoridades municipales, a pesar de que la Constitución Nacional de Panamá ordena que la autoridad municipal es la responsable del desarrollo urbano de la ciudad. Por favor lea los Artículos 232, 233 y 234 de la Constitución Política de la Nación.

La solución presentada por los últimos dos gobiernos nacionales, ‘un tercer puente’ entre la ciudad de Panamá y las ciudades de Arraiján y Chorrera, no eliminaría la viajadera. Simplemente aumentaría la invasión a la ciudad de Panamá, exponiendo a la ciudadanía a mayor inseguridad y zozobra.

A continuación, presentamos datos de 100 años que muestran cómo ha aumentado, sin planificación, el número de vehículos que entran y salen de la ciudad de Panamá.

1914, construcción del Canal de Panamá. 1932, Ferry, servicio público, 2000 por día, 1942, puente vehicular, Miraflores; 3900 por día. 1962, puente de las Américas, 9500-35000 por día. 2004, puente Centenario, 60000 por día (estimado). 2015, puentes de Américas y Centenario, 80000 por día.

En los últimos 10 años el tránsito vehicular diario a la ciudad de Panamá, a través del Canal, ha crecido por más de 10000 vehículos. A esto tenemos que agregar el tránsito vehicular del este y del norte.

A Panamá no le hace falta un 4º puente sobre el Canal, ni un tercer puente hacia el este. ¡Se debe suspender su construcción inmediatamente! Un tercer puente hacia el este empeoraría las condiciones habitacionales para todos, a un costo exorbitante de más de 2 mil millones de dólares, que dicen costaría. Y peor, los cinco o más años de construcción serán una pesadilla para todos los que usan la ciudad de Panamá.

El problema es municipal. La solución del problema es reducir la viajadera privada entre las ciudades. Las autoridades alcaldicias se deben reunir y en forma coordinada, fortalecer su respectivo ordenamiento territorial. Ejecutar planes urbanísticos locales para que los residentes tengan trabajo, escuelas, clínicas de salud, recreación, servicios de agua potable, electricidad confiable, transporte público confiable, etc. Esto no es simple, y se debe abordar expeditamente. La participación ciudadana es de suma importancia. Los municipios de Panamá, Chorrera y Arraiján deben actuar profesionalmente y con responsabilidad para el bien de los ciudadanos en esos municipios. ¡Además, debemos recuperar y salvar la ciudad capital de Panamá!

El autor es ingeniero
Lo Nuevo
Suscribirte a las notificaciones