Nuestra vigilancia sanitaria animal

Según la OIE (Organización Mundial de Salud Animal; antes Organización Mundial de Epizootias), “La vigilancia sanitaria de los animales es una herramienta destinada a seguir las tendencias de las infecciones o infestaciones, su control, brindar los datos necesarios para el análisis de riesgos en el marco de los objetivos de sanidad animal o salud pública, justificar las medidas sanitarias y suministrar garantías a los socios comerciales”.

Es superconocido que esa función pública, que debe cumplir el Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA), por mucho tiempo y por diferentes Gobiernos y motivos, no se cumple al pie de la letra, por únicamente razones presupuestarias, ya que prácticamente al MIDA y a las demás instituciones del sector público agropecuario en los últimos Gobiernos no les asignan los recursos presupuestarios suficientes para funcionar, porque son desviados para cumplir con la nefasta política de otorgar subsidios a la producción agropecuaria. Convirtiéndose en la principal causal de permanecer los técnicos en sus oficinas, cuando los productores tanto los necesitan en sus fincas ganaderas, porcinas, caprinas, avícolas, igual que en sus parcelas de diferentes rubros, como granos, frutas, hortalizas y otros vegetales.

Las enfermedades transfronterizas de la lista de la OIE, que, como país, debemos mantener vigilancia sanitaria de los animales: fiebre Aftosa, Rabia Paralítica Bovina, Peste Porcina Africana, Gripe Aviar, Encelopatía esponjiforme bovina (Vaca Loca), Brucelosis bovina, Tuberculosis bovina se han mantenido libres. En cuanto al Gusano Barrenador del Ganado (GBG) se reportaron, al final del año 2022, aproximadamente 1020 pruebas positivas dentro de la provincia de Darién, que es la barrera epidemiológica. Y recientemente, en el mes de febrero de 2023, se han reportado pruebas positivas en Cañitas de Chepo en 680 casos y que no están solo fuera de la barrera epidemiológica, sino que están fuera del área de dispersión de moscas por avión semanales, que se hacen a partir del lago Bayano, hasta la frontera con Colombia y el área 20 millas siguientes a la misma en territorio colombiano, como establecen los acuerdos binacionales.

Para los que entienden los protocolos epidemiológicos, esto se considera un BROTE, cuyo control y tratamiento es diferente. Por tales motivos la Dirección de Sanidad Animal lo declaró el 23 de febrero de 2023. Lo preocupante es que, estando, desde 2006, libres de esta enfermedad y habiéndose destinado una inversión millonaria en este control por Copeg (Comisión Panamá - Estados Unidos para el Control del Gusano Barrenador del Ganado). De tomar acciones de vigilancia y seguimiento directamente con los ganaderos, estamos seguros de que volveremos al mediano plazo al control que se tenía desde el año 2006.

Nuestro socio estratégico, Estados Unidos, a través del USDA, Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, no ha dado el visto bueno para que nuestra carne bovina pueda ser exportada a ese mercado, el mejor del mundo, donde tenemos una cuota de 60 000 toneladas métricas, desde 2011, cuando entró el vigencia el TPC con ellos. Nos estaban exigiendo 22 pruebas de residuos tóxicos, las que se cumplieron, igualmente un histórico de 12 meses de resultados en los mataderos del país, lo que se cumplió. Ahora nos exigen una equivalencia a lo que ellos hacen en Estados Unidos, en cuanto a la vigilancia sanitaria, en cuanto al uso de productos químicos que puedan ser responsables de generar residuos tóxicos en la carne bovina.

A pesar de que nuestro país es libre de la enfermedad de las aves, New Castle, el USDA, nos exige vigilancia sanitaria y pruebas de dicha enfermedad, bajo el principio epidemiológico internacional: “Si no existe la enfermedad, muéstrame la prueba negativa”. Abrigamos esperanzas en la recién sancionada Ley 352 PADE de Políticas Agroalimentarias de Estado, por el Excelentísimo Presidente, Laurentino “Nito” Cortizo y el ministro de Desarrollo Agropecuario, Augusto Valderrama; que contempla en los 15 artículos del Capítulo Cuarto modificaciones para mejorar la: educación agropecuaria, la extensión agropecuaria y la asistencia técnica agropecuaria. Áreas del saber muy importantes para el desarrollo agropecuario nacional.

“NO LE DES EL PEZ AL HOMBRE, ENSÉÑALO A PESCAR”.