Alianza evangélica llama al diálogo

En medio de las protestas registradas por la aprobación del contrato entre la empresa Minera Panamá y el Estado, que están deteriorado el orden público y económico, la Alianza Evangélica de Panamá llama a la reflexión, a la sensatez y a la calma. Y promueve el diálogo como herramienta para salir de la crisis social, que enfrenta el país. 

Los líderes de la iglesia evangélica reconocen que el país está atravesando por momentos muy difíciles como resultado de la aprobación de dicho contrato. Sin embargo, instan al Gobierno de Panamá y a los manifestantes a tomar acciones inmediatas para detener la escalada de violencia y evitar pérdidas de vidas humanas y un daño irreversible a la economía, que causará afectaciones principalmente a miles de panameños que dependen de las actividades informales para llevar el sustento diario a sus hogares.

El grupo religioso está convencido de que pueden encontrarse vías de entendimiento para solucionar la situación con “sabiduría, guianza y dirección” de Dios. “Si analizamos la historia de la humanidad, el diálogo y la sensatez siempre han triunfado por encima de la insensatez, la violencia y la incomprensión”, señalan en una comunicación pública que llegó a La Estrella de Panamá.

En ese contexto recuerdan que en julio del año pasado (2022), la iglesia evangélica y católica participaron de un diálogo para buscar soluciones de los sectores de la sociedad panameña (educadores, indígenas y otros gremios), que protagonizaron una ola de protestas en las calles y avenidas del país.

“Estamos dispuestos a volver a sentarnos con el Gobierno Nacional y con los sectores que estén dispuestos a volverse a sentar para dialogar y encontrar una salida negociada a la situación que enfrentamos”, señalan en la comunicación escrita.

Concluyen argumentando que “la forma menos traumática de solucionar la situación que enfrentamos es por medio de un diálogo, sin ninguna precondición”.

La alianza evangélica está conformada por siete directivos: Preciano Gil H. (presidente), Patricio Edgehill (vicepresidente), Luis Góndola (secretario de actas), Teresa A. de Pimentel (secretaria), Yeni Moreno (tesorera), Rogelio Batista (vocal) y Napoléon Velásquez (vocal).