Contralor inspecciona avances de la Ciudad Hospitalaria

El contralor General de la República Gerardo Solís, acompañado de director Nacional de Ingeniería, José Vence, realizó una inspección de rutina al proyecto de la Ciudad Hospitalaria “para garantizar que, de forma rápida pero bien hecha, la obra pronto esté a disposición del pueblo panameño”.

Luego del recorrido a los diferentes módulos que construyen las empresas Riga Services, S.A.; APROCOSA y CMG, S.A., el contralor Solís aseguró que el trabajo de fiscalización por parte de personal de la Contraloría es constante y que confía en la labor que viene desarrollando este consorcio para que la entrega del proyecto en su totalidad sea una realidad el próximo 15 diciembre de 2023.

Según la Coordinadora Administrativa de la Ciudad Hospitalaria, Fernanda Billard, el proyecto se distribuye en cinco módulos, el primero lo comprende la sección de Cardiología que será entregado el 15 de julio de este año.

El segundo módulo comprenden el Instituto de Nefrología, el Hospital de Nefrología, el Edificio Industrial, la Sala de Urgencia, Consulta Externa, Docencia, Administración, la Cocina y la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, este módulo será entregado el próximo 15 de septiembre, mientras que el tercer módulo comprende dos áreas de hospitalización y serán entregadas el próximo 15 noviembre de 2022.

En el cuarto módulo se encontrarán las secciones de Laboratorio, Servicio Central, el Centro de Simulación y la tercera área de Hospitalización, se entregaran el 15 de febrero de 2023; el último módulo será el Hospital Pediátrico y será el ultimo entregable el 15 de diciembre de 2023.

Este hospital se construye sobre una superficie de 31 hectáreas y tendrá una capacidad para 1,290 camas; 41 salones de operaciones; 211 consultorios; un hotel de pacientes y 3, 539 estacionamientos.

El proyecto fue licitado en el Gobierno de Ricardo Martinelli (2009-2014) a un costo de $587 millones, para ser entregado en julio de 2015. Su construcción se inició en el año 2012, pero una serie de irregularidades detectadas en la obra durante la administración del presidente Juan Carlos Varela (2014-2019) retrasó su finalización.

De acuerdo con la última adenda, el proyecto debió haber estado terminado por un monto de $554 millones, de los cuales la CSS ha pagado $338 millones; y actualmente tiene un saldo de aproximadamente $215 millones.