‘Yo solo exporto pescado. Esa es la única historia’

‘He sido el protagonista de una mala película serie B con un guión truculento e imposible’, aseguró a La Estrella de Panamá Valerio de Sanctis, propietario del Grupo Panalang Union, al que el diario italiano Corriere della Sera identificó como parte de una red para introducir cocaína en Italia y Estados Unidos.

De Sanctis defiende su reputación personal y profesional y anuncia que ha interpuesto una demanda por difamación, calumnia e injuria con agravantes ante los tribunales italianos, donde espera que se haga justicia a su buen nombre .

‘Todo lo que publicó el diario de forma irresponsable, sin tener, a mi entender, siquiera, fuentes sólidas, es totalmente falso’, asegura.

Antes de presentar la demanda, explicó, viajó personalmente a Italia para hacerse escuchar por el medio, que no le recibió.

‘No pido indemnizaciones, solo que se rectifique lo que considero son solo mentiras malintencionadas’, sostuvo.

La ‘divulgación irresponsable’ de la nota en Italia, en la página web del Corriere, de la que se hicieron eco algunos medios panameños, ha afectado directamente a su buen nombre y el de su negocio, por lo que no puede quedarse callado, explicó.

Aunque ha podido remontar las calumnias, la repercusión inicial de la información provocó incertidumbre entre sus clientes y le generaron restricciones administrativas que aún pesan sobre su negocio.

De Sanctis subrayó que durante los casi treinta años que lleva vinculado al sector pesquero en Panamá no ha tenido ni un incidente, se ha apegado a la ley y ha modificado sus servicios según las exigencias de la norma vigente y aún por delante, como las consideraciones medioambientales con las que ha certificado su práctica. ‘Ni pesco tiburón, ni vendo aletas’, apuntó para recalcar las evidentes imprecisiones de la publicación del periódico italiano, en el que se indicaba ese supuesto.

La empresa de De Sanctis, identificada con número de registro comercial en la información denunciada, que aportaba fotos con el logo de Panalang, sería la responsable de exportar bolsas de cocaína entre los filetes de pesca congelados listos para la exportación.

‘He sido víctima de un ataque difamatorio de relevantísima gravedad a través del más importante diario italiano y espero que se responda a mi protesta con todo el peso de la ley’, subrayó De Sanctis, que aportó, además de la demanda sellada, copia de las certificaciones de los ministerios públicos italiano y panameño en las que consta que no hay investigaciones penales abiertas en su contra en ninguno de los dos países.

Sobre la vinculación con el caso Lavitola, abierto en Italia por corrupción internacional, dijo que se trata de ‘un gancho periodístico engañoso’ y que nunca ha tenido relaciones comerciales ni personales con el personaje.