Gabriel Ben-Tasgal: ‘No tengo duda de que Israel y Arabia Saudita firmarán la paz’

Gabriel Ben-Tasgal es uno de los especialistas en Medio Oriente más consultados por los medios de comunicación y servicios de inteligencia de habla hispana. En exclusiva para La Estrella de Panamá, describen los importantes desafíos que experimenta una región especialmente inestable.

El conflicto entre Israel y Palestina sumó un nuevo episodio de violencia tras el ataque terrorista de Hamás en territorio israelí el 7 de octubre de 2023. Este suceso reavivó las tensiones en una región que lleva más de siete décadas sin alcanzar una solución definitiva.

Las tensiones alcanzaron un punto crítico cuando Israel derribó un dron disparado desde Yemen pocas horas después de interceptar un misil balístico procedente del mismo país. La escalada de violencia se ha movilizado a varios países, que trabajan intensamente para encontrar una solución diplomática que evite una guerra total en Medio Oriente.

A más de un año de los hechos, los enfrentamientos ya no se limitan a las tropas israelíes y al grupo palestino en la Franja de Gaza. Organizaciones extremistas de la región, todas aliadas de Hamás y respaldadas por el régimen de Irán, lanzaron una ofensiva contra Israel desde el 8 de octubre, provocando una expansión del conflicto a nivel regional.

El grupo libanés Hezbollah intensificó los ataques contra Israel mediante el lanzamiento de decenas de proyectiles. Paralelamente, los rebeldes hutíes de Yemen se unieron al conflicto con ataques constantes al transporte marítimo en el Mar Rojo y el Mar Arábigo, además de lanzar misiles y drones contra Israel. De manera similar, milicias chiítas en Irak y Siria han incrementado sus amenazas y ataques contra Tel Aviv, manteniendo la región en un estado de alta inestabilidad.

En relación al apoyo de Donald Trump, Ben-Tasgal opina que el político podría alentar a Israel a atacar las instalaciones nucleares de Irán. “Totalmente. Israel ha neutralizado buena parte de las capacidades defensivas de Irán”.

El analista explicó que para evaluar la contundencia de un ataque israelí, se debe observar si las acciones afectan tres elementos clave: el liderazgo iraní, las capacidades petroleras de la nación y sus instalaciones nucleares. Esta postura subraya la determinación israelí de proteger su seguridad nacional frente a lo que percibe como una amenaza existencial.

Además, Ben-Tasgal desestima las acusaciones hechas a Israel sobre crímenes de guerra y las califica de “decisiones políticas sin sustento probatorio suficiente”. “El ratio de muertos en Gaza se acerca al 1:1, un muerto militar por cada civil, una cifra especialmente baja en combates donde los yihadistas utilizan a sus civiles como escudos humanos”, afirma, cuestionando la confiabilidad de los datos proporcionados por Hamás . La crítica del especialista se extiende a organismos como la Unrwa (Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo), acusándolos de estar “ideológicamente alineados con el grupo islamista”.

En cuanto al aumento del antisemitismo, particularmente en las universidades norteamericanas, Ben-Tasgal lo atribuye a una combinación de radicalismo islámico, ciertos medios de comunicación y corrientes de extrema izquierda. “El antisemitismo es un fenómeno antiguo y destructivo. Los judíos suelen ser el 'canario en la mina', los primeros en ser atacados en sociedades degradadas”, advirtió.

También, critica la paradoja de grupos feministas y LGTBQ+ que elevan banderas de movimientos yihadistas. “Es una bastardización de la interseccionalidad”, dice, describiendo cómo una visión simplista de las identidades como víctimas y victimarios genera alianzas contranatura.

Ben-Tasgal conversa sobre el desenlace del conflicto actual en la región. Predijo que Hamás perderá el control de Gaza y que Israel firmará un acuerdo de paz con Arabia Saudita, consolidando una alianza significativa con los sunitas de la región. “No tengo la menor duda de que Israel y Arabia Saudita firmen la paz”, afirmó con optimismo, a pesar de los retos que enfrenta el país.

Mientras continúa la guerra y el conflicto se sigue expandiendo en toda la región, se vuelve indispensable conocer el contexto de un enfrentamiento que no encuentra solución y se cobra la vida de millas de víctimas.

El autor Gabriel Ben Tasgal explica en detalle los pormenores del conflicto israelí-palestino en el libro.300 preguntas en 300 palabras.

En el prólogo señala que “el odio antisemita se manifiesta de tres formas”: “Primero, un judeófobo moderno asegura que el Holocausto no sucedió. Segundo, el judeófobo actual expresa que los judíos (o el Mossad) están detrás de todas las crisis. Tercero, el judeófobo moderno entiende que es discriminador e inaceptable declararse antisemita por lo que opta por odiar al judío entre las naciones (Israel) y lo hace de forma obsesiva, maniqueísta y demonizadora”.

Asimismo, sostiene que “criticar a Israel es legítimo” y hace referencia a la “demonización obsesiva” del Estado de Israel desde medios de comunicación y otras instituciones, así como desde académicos y partidos políticos.