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- 30/10/2024 00:00
- 29/10/2024 18:52
El secretario general de la ONU, António Guterres, aseguró este martes que el veto a la Agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa) en Israel y los territorios ocupados, aprobado ayer por el Parlamento israelí (Knéset), tendrá “un impacto devastador” en la población de Palestina.
“Según tenemos entendido, la ley da 90 días antes de que esto se aplique... Estamos en una fase temprana. Obviamente, si se aplica, tendrá un impacto devastador en la situación humanitaria de los palestinos en el territorio ocupado”, dijo hoy en su rueda de prensa diaria el portavoz de la Secretaría, Stephane Dujarric.
La Knéset aprobó la noche del lunes dos leyes, que entrarán en vigor dentro de tres meses, para prohibir la actividad de la UNRWA en Israel, así como limitar su capacidad operativa en los territorios palestinos ocupados de Cisjordania y Gaza.
Dujarric añadió que Guterres ha escrito hoy una carta al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, “exponiendo sus preocupaciones y las cuestiones de derecho internacional” que plantea esta ley.
Y destacó que, de acuerdo con el derecho internacional humanitario, Israel, como potencia ocupante, “sigue teniendo la obligación de garantizar que se cubran las necesidades de la población”, y si el Estado hebreo “no está en condiciones de satisfacer esas necesidades, debe permitir y facilitar las actividades de la ONU”.
Por su parte, la portavoz de la Asamblea General, Sharon Birch, indicó hoy que el presidente de este órgano, Philémon Yang, está “profundamente preocupado” por la aprobación de estas dos leyes, que supondrán “un colapso de las futuras operaciones en el territorio palestino ocupado”.
“Estas dos leyes agravarían una situación humanitaria, ya de por sí catastrófica”, incidió Birch.
La portavoz subrayó además que la Asamblea General de la ONU empujará a los Estados miembros a “trabajar y conducir” la acción necesaria “para hacer frente a este problema”.
Al menos 93 palestinos, incluidos 25 niños, murieron en un bombardeo israelí contra un edificio residencial en la localidad de Beit Lahia, en el norte de la franja de Gaza, donde desde hace 24 días el Ejército mantiene un intenso cerco militar, informaron las autoridades del enclave.
En el edificio de cinco plantas se refugiaban “cientos de civiles desplazados”, según las autoridades sanitarias, que denunciaron cómo el asedio israelí contra los tres principales hospitales del norte de Gaza impide ahora decenas de heridos puedan ser atendidos dada la falta de medios y médicos para ello.
Además, medios palestinos informaron de un ataque aéreo poco después contra las inmediaciones del hospital Kamal Adwan, también en Beit Lahia, al que ya habían llegado algunos afectados por el bombardeo.
El Ejército israelí no ha informado todavía del ataque, uno de los más mortíferos hasta la fecha desde el inicio de la guerra.
En un comunicado, la oficina de medios del Gobierno gazatí aseguró que en estos momentos hay más de 40 desaparecidos entre los escombros del edificio bombardeado.
Desde que se recrudeció la guerra el pasado 7 de octubre, 43.020 palestinos han muerto en una franja de Gaza devastada -la mayoría mujeres y niños- y otros 101.110 han resultado heridos, según el Ministerio de Sanidad del enclave.