Purga en el gobierno de Bukele, a seis meses de las elecciones

“La guerra contra la corrupción fue anunciada el 1 de junio y ya está dando resultados claros”, con estas palabras el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció en su cuenta de Twitter, la detención del diputado oficialista Erick García por “falsedad ideológica”, esta semana.

Según la Fiscalía, García firmó un documento el 7 de diciembre de 2020, para registrar un préstamo de $90,000 a su asesor Luis Alonso Portillo, aunque la “transacción nunca fue realizada”, porque hubo “alteraciones”.

La acusación plantea que el documento firmado “adolece de falsedad, pues hace referencia a hechos que no sucedieron, es decir, no hubo entrega de dinero y se incorporó información falsa en el mismo”, detalla la solicitud de desafuero planteada por el fiscal general Rodolfo Delgado, con el objetivo de retirarle la inmunidad al diputado.

Al igual que García, también fue detenida su suplente, Nidia Araceli Turcios, fruto de un proceso de investigación “profundo”, que buscaba “evitar posibles fugas”, aunque la Fiscalía no detalló el delito que cometió la exfuncionaria.

Tras conocerse las detenciones, la Comisión Nacional Electoral del partido oficialista, Nuevas Ideas, comentó que “dejaba sin efecto” la candidatura de ambos políticos en los Comicios Electorales de 2024. También publicó la expulsión de ambas personas del partido y detalló que “no formará parte del proyecto [de Nuevas Ideas] la persona que interponga sus intereses personales por sobre los del pueblo salvadoreño”.

Estas no son las primeras detenciones que el Gobierno concreta sobre una figura ligada al oficialismo, pues hace una semana fue aprehendido el asesor de seguridad del Gobierno, Alejandro Muyshondt, quien fue acusado de ser un “doble agente” desde el año 2019.

Bukele acusó a Muyshondt de supuestamente ayudar al exmandatario Mauricio Funes, para quien trabajó entre 2009 y 2014, a “evadir la justicia”, después de que el ex gobernante fue condenado a 14 años de prisión por los delitos de “agrupación ilícita” e “incumplimiento de deberes”.

El presidente también señaló que las investigaciones del  Organismo de Inteligencia del Estado (OIE) revelaron que  Muyshondt y  Funes filtraron documentos clasificados y, “en varios casos modificados” a tres periodistas sobre las operaciones que el Gobierno realiza, en el marco de la 'guerra contra la corrupción'.

El mandatario asegura que hay “pruebas directas” que muestran cómo un personero de la OIE avisó a  Muyshondt de la investigación que se está llevando en su contra, lo que llevó al ex asesor a filtrar la información que acusaba al diputado Erick García.

Aun así, Bukele aclara que algunas pruebas “aún requieren mayor investigación, como el posible consumo de droga adquirida a un narcotraficante, cuyo alias es 'Anubis'”, por parte de García.

Durante las últimas semanas,  Muyshondt y García protagonizaron un intercambio de mensajes en los medios de comunicación, en los cuales el primero mostró unas capturas de pantalla en las que supuestamente se ve al diputado conversando con un narcotraficante sobre unos paquetes blancos que contenían presuntas sustancias ilícitas, provenientes de México.

“¿Por qué en las capturas de pantalla donde decís que yo hablaba con un narcotraficante no hay nombre, número de teléfono ni foto?”, cuestionó García al ex asesor de seguridad.

“Ya que no soy yo la persona del chat, Muyshondt me acusó falsamente. Por tanto, el señor Muyshondt deberá responder a las autoridades”, agregó el exdiputado.

Aun así, la detención de García no está relacionada con estos hechos, sino con el tema de los préstamos. La investigación continúa su curso, por lo que todavía faltan hechos por confirmarse.