Oposición venezolana apunta al ejército; crece la presión internacional

Las presiones sobre el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, en quien se fija la mirada como posible mediador a la salida de la crisis postelectoral de Venezuela, han subido de tono este lunes luego de que un grupo de expresidentes de Latinoamérica le instaron a reconocer el triunfo de Edmundo González, líder de la oposición y rival político de Nicolás Maduro, como vencedor en los comicios electorales presidenciales del pasado 28 de julio.

Lula, quien inicia una visita de Estado a Chile (4-5 de agosto) para concretar varios acuerdos de carácter comercial, fue recibido por su homólogo Gabriel Boric en el palacio de la Moneda. Ambos de tendencia ideológica de izquierda, mantienen una posición distinta sobre el futuro de Maduro en el país sureño. Boric ha sido más drástico. El chileno no reconoce el triunfo de Maduro y no validará ningún resultado que no haya sido confirmado por organismos internacionales. En cambio Lula ha sido más tibio, precisamente porque al tomar partida podría lacerar su rol como mediador en la crisis venezolana.

Este lunes, 30 expresidentes que forman parte del Instituto Internacional para la Democracia y Asistencia Electoral (IDEA) publicaron una nota en la que le instan a reconocer como presidente a González, ante las sospechas de fraude por parte de la oposición que publicó el 80% de las actas que aventajan a la oposición tres a uno sobre Maduro. En la nota el grupo IDEA hizo un llamado a Lula para que evite lo que describen como una ‘herida de muerte’ a la democracia, los derechos humanos y el Estado de Derecho, que sería consumada con la eventual aceptación a los resultados presentados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano. Añaden que el Chavista hizo un atropello a la verdad electoral para perpetuarse en el poder y afirmarlo a través de una política de Estado represiva.

Brasil, Colombia y México, tres países con posiciones suaves sobre la crisis venezolana, hicieron un llamado a su homólogo Maduro para que avance en la divulgación de las actas electorales, cosa que una semana después de las elecciones no ha efectuado el Consejo Nacional Electoral. En vez, el pasado viernes publicó las cifras y porcentajes que daban como ganador a Maduro con 6.4 millones de votos, mientras que a González un cúmulo de 5.3 millones. Este lunes el presidente del Consejo Nacional Electoral Elvis Amoroso, entregó al presidente del Tribunal Supremo de Justicia los escritos y anexos que justificarían los resultados emitidos el viernes por el CNE, así como los elementos de prueba de un supuesto ataque cibernético.

Mientras la tensión se eleva por las expectativas de los siguientes movimientos del régimen de Maduro y la resistencia de la oposición, su máxima líder, María Corina Machado apeló a la conciencia de los militares y policías de su país para que “se coloquen del lado del pueblo y de sus propias familias”. En un comunicado en su cuenta de X, Machado apuntó al blanco de la balanza en este conflicto: el ejército, que en voz de Maduro está más unido que nunca. Sin embargo, la oposición ve en los uniformados un péndulo para virar el escenario.

El binomio de González y Machado tendió la mano “con garantías para quienes cumplan con su deber constitucional”, aunque destacó que no habrá impunidad, un compromiso asumido con los venezolanos.

Machado llamó a impedir las acciones de grupos organizados por la cúpula madurista, “una combinación de escuadrones militares y policiales y grupos armados al margen del Estado que golpean, torturan y asesinan al amparo del poder maligno que representan”.

La mujer que encabeza el clamor de la facción opositora llamó a las Fuerzas Militares a parar de inmediato esas acciones y urgió a impedir el desenfreno del régimen contra el pueblo y a respetar y hacer respetar los resultados de las pasadas elecciones, resaltando que Maduro los quiera hacer cómplices del golpe de Estado que dio. La también ingeniera, aseguró que las actas publicadas por la oposición en un portal de Internet, comprueban la victoria de la oposición, y recordó el demoledor informe del Centro Cárter sobre las condiciones y el resultado electoral, organismo invitado por Maduro como veedor del proceso. Enseguida volvió a acusar a Maduro de “fabricar unos resultados cuando, además, el lapso legal para la publicación de los mismos ha vencido”.

El llamado a los uniformados se extendió también a sus familiares. A quienes tienen hijos, padres, parejas que forman parte de las Fuerzas Armadas para que les exijan no reprimir a los manifestantes y que desconozcan órdenes ilegales, para sumarse a la soberanía popular expresada en las elecciones.

Machado denunció que el alto mando se alinea con Maduro y “sus viles intereses”. La opositora recordó a los uniformados que representan al pueblo que salió a votar, por sus compañeros de la Fuerza Armada y por sus familiares, cuya voluntad quedó expresada el 28 de julio.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, dijo el lunes que junto al líder de Brasil, Luiz Inácio Lula, apoyará al pueblo de Venezuela en su búsqueda de “transparencia” tras la cuestionada reelección de Nicolás Maduro, según un cable de la agencia AFP.

“Junto con el presidente Lula, apoyamos la aspiración del pueblo venezolano a una elección transparente. Esta exigencia está en el corazón de cualquier democracia”, indicó Macron en un mensaje en español en las redes sociales tras una entrevista telefónica con el presidente brasileño.

Estados Unidos, Perú, Argentina, Uruguay, Ecuador, Costa Rica y Panamá reconocieron a González Urrutia como vencedor mientras que otros países, como Canadá, pidieron la publicación de resultados completos.

Por otra parte, la Secretaría Ejecutiva de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre violaciones de derechos humanos en Venezuela de la Organización de Estados Americanos (OEA) contabilizó al menos 300 protestas desde el 28 de julio centradas en denuncias sobre irregularidades en el conteo de votos, obstáculos en el proceso de votación y como consecuencia un fraude en las urnas.

En un informe, la comisión de la OEA recoge de la prensa, sociedad civil y particulares, que al menos 115 de estas manifestaciones han sido reprimidas violentamente por el Estado. Esta opresión replica en los patrones observados en 2014 y 2017 en un contexto de ausencia de Estado de Derechos y democracia, está protagonizada por grupos civiles armados conocidos como “colectivos”, se lee. De acuerdo al reporte, estos grupos actúan con el consentimiento estatal bajo el “Sistema Popular de Protección para la Paz” que sumó a grupos de tareas de vigilancia, seguridad y contraloría social.

En este sentido, la actuación de los colectivos podría generar al Estado consecuencias internacionales por su tolerancia, colaboración o accionar en masivas violaciones de derechos humanos.

Las violentas represiones en Venezuela han dejado un saldo de 40 personas gravemente heridas y más de 17 muertes según informes del Monitor de Víctimas, la mayoría de ellos jóvenes, incluyendo dos adolescentes. Información preliminar describe que nueve de estas personas murieron por disparos de armas de fuego en la espalda o la cabeza, lo que podría caracterizarse como ejecuciones extrajudiciales.

De acuerdo con información del Ministerio Público, al menos 749 personas han sido detenidas, que el informe califica como parte de los patrones de persecución contra estudiantes y líderes universitarios. Los detenidos - que Maduro contabilizó hasta 2 mil - enfrentan acusaciones de terrorismo y denuncian que no han tenido derecho a escoger sus abogados libremente y un debido proceso. El informe cita 11 desapariciones forzadas.

Por otro lado, la OEA remarca las persecuciones políticas en contra de líderes de la oposición quienes han sido amenazados y perseguidos. Tal es el caso del diputado opositor Freddy Superlano, detenido el 30 de julio, quien habría sufrido torturas. El escrito añade que María Corina Machado, quien cuenta con medidas cautelares de la CIDH desde 2019, ha sido intimidada por denunciar irregularidades en el conteo de votos.

En el plano diplomático la OEA destaca que se han registrado amenazas a la inviolabilidad de embajadas que brindan refugio a opositores políticos, como la de Argentina, donde al menos hay seis opositores asilados.

Por último, la Comisión recibió bloqueos de comunicación y agresiones a periodistas y trabajadores de medios, que incluyen detenciones arbitrarias, impedimentos de cobertura periodística y hostigamientos. En este contexto señalan 60 casos de agresiones a la libertad de expresión, incluyendo al periodista Jesús Romero, herido mientras cubría las manifestaciones. Cinco periodistas fueron detenidos por fuerzas del orden y al menos cuatro fueron deportados.