Patrimonio del FAP se sitúa en $1.400 millones y adecúan ley para capitalizarlo

Al cierre de 2023 el Fondo de Ahorro Panamá (FAP) tenía un patrimonio de $1.400 millones, dinero que pudo ser un colchón durante la pandemia, pero “no” fue utilizado aunque la ley lo permitía sin devolverlo, comentó el titular del Ministerio de Economía y Finanzas, Héctor Alexander, a un grupo de periodistas en su despacho.

La reacción del ministro Alexander surgió tras las críticas recibidas al presentar ante la Asamblea Nacional un proyecto de ley para ajustar los aportes del Gobierno Nacional al fondo soberano, así como una estrategia para capitalizarlo y ahorrar a partir de 2025.

La fórmula del ministro Alexander plantea cancelar las obligaciones pendientes de los años pandémicos, cuando la situación financiera estuvo complicada.

Según la Ley 5 de 2012, que crea el FAP, el gobierno está obligado a transferir $1.000 millones por año, es decir, contemplando los años 2020, 2021 y 2022, justo cuando la pandemia de la covid-19 afectó las finanzas de Panamá y el mundo.

Con la propuesta presentada ante la Asamblea, al FAP le transferirán los recursos para cubrir los aportes pendientes de las vigencias fiscales 2018 y 2019.

El gobierno debió pagarle al FAP en la vigencia del año 2020, unos $270 millones, para el año 2021 otros $282 millones y para el año 2022 –que se calcula con el año 2021– eran $386 millones.

“Por favor, en los momentos más difíciles de nosotros como país (pandemia covid-19), ellos (FAP) nos van a decir a nosotros (Gobierno Central), que en vez de ellos darnos (dinero) a nosotros, nosotros somos los que tenemos que darle dinero a ellos. Eso no puede ser”, exclamó el titular del MEF.

“La cifra de aporte se duplicó en el momento más difícil para nosotros, eso no puede ser”, repitió. Y, agregó: “Yo hablé con ellos (FAP) y llegamos a un acuerdo y es eso lo que está en la Asamblea”, afirmó.

La propuesta del ministro Alexander implica transferir al FAP un mínimo anual de $200 millones a partir del año 2025 hasta 2033, y que ese monto se incremente $50 millones cada cinco años a partir de 2034, con la idea de capitalizar el fondo y ahorrar. Además de que cumpla su rol de instrumento de política anticíclica, donde se establecen situaciones excepcionales en las que no será posible realizar aportes, como la pasada pandemia.

Además, la propuesta del dos veces titular del MEF es que cuando se llegara a tener un patrimonio equivalente a 5% del PIB, todos los rendimientos de la inversión del fondo irían al Gobierno Nacional.

“El fondo soberano está para usarlo cuando hay situaciones difíciles, ese es el propósito de un fondo soberano, que esté allí para usarlo cuando se necesite, no solo es ahorrar por ahorrar, porque de haber dado los aportes en ese momento, la situación del país hubiese empeorado”, aseguró.