Empresarios buscan que el agro y la industria agroalimentaria garanticen la seguridad alimentaria panameña

Posicionar al sector primario y la industria agroalimentaria como un conglomerado estratégico que garantice la seguridad alimentaria, genere empleos de calidad y promueva el desarrollo económico local son parte de los objetivos que llevaron al Consejo Nacional de Empresa Privada (Conep) a convocar a representantes del sector público, el productivo y la academia para que identifiquen los retos y oportunidades y conjuguen esfuerzos para lograrlo.

El foro agropecuario denominado ¿Cómo transformamos al sector?, el primero organizado por el Conep, se centró en cuatro bloques: productividad, competitividad, financiamiento para el desarrollo y marcos normativos; en donde los expositores presentaron los elementos necesarios para acelerar la transformación del sector agropecuario por parte de sus actores claves, además, expusieron sobre las nuevas tendencias y prácticas que están transformando al sector en términos de tecnificación, diversificación y aumento de la productividad, así como la presentación de estrategias sectoriales para mejorar la competitividad.

El encuentro desarrollado en la ciudad de Chitré, provincia de Herrera, y sirvió para que Eduardo Ortega-Barría, titular de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt) abordará el tema de la innovación en el sector agropecuario panameño, destacando que uno de los retos que aún tiene Panamá es que se articule el conocimiento que se genera en la universidad y en los centros de investigación, con las necesidades de las empresas y de la población del país.

“Queremos crear centros de investigación fuera de la ciudad de Panamá que puedan generar valor, ofreciendo soluciones a problemas regionales, sectoriales, productivos, sociales, ambientales y de comunidades específicas, con investigadores locales en una colaboración con universidades, centros de investigación, el sector productivo local, pero también con los gobiernos locales para lo cual este año tenemos fondos para financiar dos centros regionales por el orden de $3.5 millones”, dijo el regente de la Senacyt.

Destacó que desde 2019, la Senacyt ha invertido unos $1.1 millones en diversos proyectos vinculados al sector agropecuario panameño y que son obtenidos a través de las convocatorias que hace la entidad.

Por su parte, Gerardo Escudero, del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), trató las tendencias disruptivas o con el potencial de “romper” estándares tradicionales aplicables a Panamá.

Aunque en Panamá, el consumo de arroz es el más importante del país y el mayor de la región, su baja producción local se debe a que no se ha integrado las formas de cultivo tradicional con la tecnología, que asegura no reemplazarán las técnicas ni procesos por completo.

“Las tecnologías antiguas tienen que combinar y coexistir con las modernas innovaciones tecnológicas para optimizar la producción agrícola, mejorar la productividad y desarrollar la agroindustria y producir alimentos cada vez más sanos”, afirmó el representante de la IICA.

En tanto, Rubén Gill, presidente del Conep, agradeció a los asistentes y participantes, ya que es importante para la empresa privada que se promuevan espacios ideados para el abordaje integral de la situación del agro y de sus potencialidades, es de suma importancia para la transformación y crecimiento de este sector en el interior del país.