Acuerdos por ‘air bags’ frenan detalles de accidentes

Los acuerdos confidenciales por air bags defectuosas de Takata Corp. impiden que se tenga acceso a información relevante que otras víctimas podrían utilizar para presentar reclamos por daños.

Los acuerdos tienen sentido económico para las partes de los acuerdos, pero Takata y otros acusados, entre ellos Honda Motor Co. y Fiat Chrysler Automobiles NV, obtienen una ventaja adicional al mantener información comprometedora fuera del alcance de terceros interesados en demandarlos. Los acuerdos rápidos y secretos, piedra angular de los litigios por responsabilidad del producto en todas las industrias, contribuyen a explicar por qué, pasados años de los primeros llamados a revisión, es tanto lo que sigue desconociéndose sobre los defectos vinculados a cuatro muertes en los Estados Unidos. Los pocos casos presentados por lo general se han resuelto antes de que los abogados de las víctimas adquieran pruebas.

Cinco de una decena de demandas que analizó Bloomberg News quedaron zanjadas antes de que pudiera revelarse información en las cortes. Uno de los casos se encuentra en evaluación para un posible acuerdo, otro se encuentra en proceso de mediación y otro fue abandonado. Ninguno ha llegado a juicio.

La falta de información profundiza la confusión que rodea una crisis en aumento. Los llamados a revisión de más de siete millones de vehículos por parte de al menos 10 compañías automotrices hacen que los conductores abriguen dudas respecto de los riesgos para su seguridad.

Grupos de defensa de la seguridad afirman que la Administración Nacional de Seguridad del Tránsito de los Estados Unidos —NHTSA por la sigla en inglés— no hace lo suficiente en su investigación de Takata, mientras que un gran jurado federal ha enviado a la compañía una intimación a entregar documentación y explicar los defectos de sus dispositivos de seguridad.