Fomentando la competencia en los Actos Públicos

Mis estimados lectores, hoy abordaremos un tema, que al menos para mí, representa un gran reto. Como mucho de ustedes saben Acodeco no sólo protege los derechos de los consumidores, también cuenta con una Dirección de Libre Competencia cuyo rol principal es protegernos de la colusión (acuerdo entre competidores) y fomentar el proceso de libre competencia entre las empresas que se desenvuelven en un mismo mercado.

A lo largo de estos años hemos tenido bastante éxito en la detección de prácticas restrictivas de la competencia, habiendo descubierto algunos carteles como: Harinas, azúcar, pollo, carnes, entre otros, que incluso ya han pagado sus multas. Sin embargo estamos redoblando esfuerzos en la ‘prevención de las prácticas anticompetitivas' y en el ‘fomento a la libre competencia'.

Y en esa media, estamos mirando las compras del Estado. Por definición de la Ley 22 del 2006 el ‘Estado' es consumidor. Por esta razón debe, como cualquier consumidor, buscar el mejor precio para realizar sus compras. ¿Qué significa esto? Todas las entidades del Estado no sólo deben ser transparentes al momento de realizar sus compras, sino que tienen como obligación redactar pliegos de cargos que permitan la mayor participación de empresas competidoras.

Para ello, Acodeco está diseñado un ‘Programa de Consultas', muy sencillo, en el cual todas las Entidades que así lo deseen pueden participar, con sólo firmar un Convenio Interinstitucional que servirá de guía para establecer los pasos a seguir.

¿Cómo se haría en la práctica? La Entidad que va a realizar una compra podrá enviar, previamente, el pliego de cargos a Acodeco, quien en un cortísimo plazo, realizará recomendaciones a la Entidad contratante, con el único propósito de fomentar la competencia. Las sugerencias que Acodeco realizará no estarán dirigidas a cambiar las necesidades de compra de la Entidad sino en asegurarnos que el texto de pliego de cargos (requisitos que pide la Entidad) no existan elementos que restrinjan, sin justificación, la entrada de más competidores a la licitación.

La ventaja de esta medida es que Acodeco como conocedora de los principios de libre competencia, puede observar restricciones en el pliego que muchas veces pasan desapercibidas, ya que ésta no es la experticia de la Entidad solicitante; no obstante, al modificarlos se garantiza la recepción de mayor cantidad de ofertas sin afectar la compra que la Entidad está pensando hacer.

Adicionalmente las Entidades que suscriban los convenios, deberán notificar a la Acodeco cualquier acto que pueda ser indicativo de una colusión en un acto público que se ha efectuado, esto nos ayudaría a detectar más fácilmente cualquier cartel de precios, que sin esta comunicación, posiblemente, no se hubiese conocido.

Finalmente, consideramos apropiado que cada entidad eleve su estándar de contrataciones, y se impongan, incluso, más retos de los que establece la Ley, ya que incorporar en su toma de decisiones una variable competitiva y un elemento adicional de transparencia dará la seguridad a los jefes de estas carteras que no han dejado pasar por alto ningún elemento, que luego pueda ser cuestionado como un ‘favoritismo' especial a alguna empresa.

Los controles adecuados son importantes, pero no son suficientes, toda vez que una Entidad, aun haciendo lo que le corresponde, puede dejar de ver elementos que no están dentro de los controles rutinarios. El Programa que pretende implementar Acodeco va un paso adelante, para asegurarnos que las compras que realiza el Estado, no sólo son transparentes sino que abren el compás a la participación de todos.

DIRECTORA NACIONAL DE LIBRE COMPETENCIA