
- 08/04/2025 18:32
A punto de cumplir un año halagador al frente de la conducción técnica del Barcelona, Hans-Dieter Flick conocido en el ambiente del fútbol más como Hansi Flick, entra hoy ante el Dortmund en el tramo crucial de su primer periplo con el club catalán, que le podría encumbrar si alcanza los tres títulos que ha logrado poner a su alcance: Champions League, La Liga y la Copa del Rey.
En la Copa del Rey se enfrentará contra su tradicional y enconado rival, Real Madrid, el próximo 26 de abril en el Estadio de La Cartuja de Sevilla para definir el campeón; en la Liga española es líder en una disputa cerrada también con el Madrid al que lleva cuatro puntos a falta de 8 jornadas, cuyo cierre está programado a cumplirse el 25 de mayo, y en la Champions League necesita superar al Borussia Dortmund en estos cuartos de final, que inician hoy, con el partido de ida en el estadio Olímpic Lluís Companys.
Es un imperativo para dar un paso en firme hacia su principal anhelo que es alzar la orejona el 31 de mayo en el Allianz Arena de Múnich. Un estadio que conoce al dedillo Flick y donde alcanzó los logros más importantes en su carrera dirigiendo al Bayern de Múnich. En la línea de coincidencias, se trata del club al que podría enfrentar en semifinales, de superar al Dortmund, y que el Bayern haga lo mismo ante el Inter.
Flick asumió el cargo de entrenador del Barcelona el 29 de mayo de 2024 en medio de un ambiente tensionado principalmente por su situación económica, la inestabilidad en la dirección técnica y los insatisfactorios resultados deportivos que no vislumbraban un regreso cercano a los tiempos de gloria. Su última conquista de la Champions League fue en la temporada 2014-15, cuando derrotó 3-1 a la Juventus, en una final disputada en Berlín, una ciudad alemana- vaya nueva coincidencia-, como sucederá esta vez cuando Múnich sea la anfitriona.
El estratega teutón de vuelta a la dirección técnica tras su despido de la Selección de Alemania por el pobre desempeño, en el mundial de Catar 2022, ha sabido comprender y reflejar en el campo el espíritu y el gusto por el buen juego abanderado por el Barcelona en su rica historia deportiva. Contra toda previsión, Flick ha puesto al Barcelona de vuelta a los primeros planos competitivos, manteniendo su posicionamiento apoyado en el aporte permanente de La Masia, la escuela emblemática del club que le nutre de extraordinarios talentos jóvenes.
Contra el Dortmund, que el año pasado llegó a la final de la Champions, el Barcelona parte como favorito, pero tendrá que cuidarse de los contrataques que pueden hacerle daño en las pérdidas del balón durante la presión defensiva alta y el ritmo de la posesión que suelen presentar contra sus rivales.
El Dortmund dirigido por Niko Kovac no está atravesando un buen rendimiento en la Bundesliga, en donde se ubica en el octavo lugar, mostrando sobre todo deficiencias ofensivas, sin embargo, en la Champions League se han presentado más efectivos consiguiendo 28 goles en esta competición, la segunda cuota más alta después del Barcelona que suma 32.
Son un rival de sumo cuidado y Flick conoce como ningún otro entrenador las características actuales del fútbol alemán y requiere llegar con ventaja a la revancha de la serie estipulada para el martes 15 de abril en el Westfalenstadion de Dortmund.