Procrastinación, el enemigo número uno de los emprendedores

Actualizado
  • 21/05/2022 00:00
Creado
  • 21/05/2022 00:00
No existe el mejor momento para hacer algo, por tanto traza un plan y empieza a hacerlo hoy mismo, paso a paso
La mayoría de las cosas que merecen la pena requieren tiempo y dedicación.

Tal vez no seas emprendedor, pero si quieres hacer algo nuevo, o terminar algo que iniciaste, o bien ordenar el placard desde hace años, entonces este artículo es para ti.

¿Te has encontrado diciéndote estas frases?: Este no es el mejor momento. Es demasiado complicado. Empezaré mañana, seguro. No tengo dinero para hacer esto. Tengo que hacerlo, pero no tengo tiempo.

Quiero que sepas que: No existe el mejor momento para hacer algo, por tanto traza un plan y empieza a hacerlo hoy mismo, paso a paso. La mayoría de las cosas que merecen la pena requieren tiempo y dedicación. Separa en tareas más pequeñas y crea un plan detallado para llegar de A a B en un plazo determinado. ¿Por qué no ahora? Hay una regla que yo sigo y es que si puedo hacer algo en menos de 5 minutos, lo hago ahora mismo. Si requiere más tiempo me añado la tarea en el calendario de mi móvil en un día y hora determinados con una alarma. En la mayoría de los casos se pueden buscar alternativas o lanzar algo sin ni siquiera tener creado nada y sin casi inversión. Todos tenemos las mismas horas en el día, por tanto tenemos el mismo tiempo. Es cuestión de elegir tus prioridades y dejar de hacer algunas cosas.

¿Qué quiere decir procrastinar? Procrastinar es una palabra que últimamente se escucha mucho y que significa diferir o aplazar, ir dejando las cosas para otro momento.

En psicología, la procrastinación tiene un papel muy importante porque ataca la parte del cerebro de la recompensa. Esto quiere decir que si no veo un resultado rápido es posible que no merezca tanto la pena. Por lo general las tareas que tendemos a procrastinar son tareas importantes que implican grandes cambios y grandes resultados, pero que son a medio o largo plazo. Estos procesos, si no se dividen en pequeñas tareas más manejables, se hacen demasiado complejas para el cerebro y esto causa rechazo y abandono.

Esta es la razón por la que nos cuesta tanto cambiar y salir de la zona conocida como me gusta llamarla.

Te dejo hoy algunos consejos para comenzar a dejar de procastinar: Diferencia lo importante y urgente. Aprende a gestionar tu tiempo haciendo antes que nada esta diferenciación.

Cosas importantes y urgentes: Son tareas o proyectos que debes empezar hoy y lo sabes. Posiblemente las estés dejando para más adelante porque te van a llevar mucho tiempo y con el trabajo del día a día no puedes ponerte a ello. Cambia el chip ya y evita distracciones innecesarias. Dedícales una o dos horas a diario a estas tareas o proyectos.

Cosas importantes y no urgentes: Son tareas o proyectos que sabes que van a ayudarte, pero que no tienes que hacer hoy o esta semana. Lo mejor es que las planifiques en el calendario para empezar un día específico.

Cosas no importantes y urgentes: Redes sociales, llamadas de teléfono, notificaciones de Whatsapp, personas que te interrumpen y empiezan a contarte su vida, problemas, reuniones... La solución es apagar el teléfono, cerrar la puerta poniendo un cartel de 'no molestar' y planificar todo lo posible. Puedes plantearte buscar espacios fuera de casa o de la oficina para finalizar tus temas.

Cosas no importantes y no urgentes: Muchas veces son asignaturas pendientes, que se acumulan por falta de urgencia. Algunas veces viene bien. Pero estas tareas consumen tu tiempo sin aportar valor. Recuerda que el tiempo es finito. Inviértelo en alguna cosa que te ayude de verdad a ser más feliz.

Espero te sirva para comenzar a hacer o dejar de hacer algo que te ayude a cumplir tus metas o sueños.

¡Buena semana!

Paula Cabalén @paulacabalen

Coach de vida y negocios

Consultora. Conferencista.

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