¿Qué tienen en común las personas exitosas?

La gratitud es una fuerza inmensamente poderosa que podemos utilizar para expandir nuestra felicidad, crear relaciones afectuosas e incluso, mejorar nuestra salud.

Estudios científicos han encontrado que las personas que conscientemente se concentran en la experiencia de la gratitud, experimentan mayor bienestar emocional y salud física que las personas que no lo hacen.

Quienes cultivaron la gratitud:

• Se sintieron mejor y más satisfechos con cada aspecto de sus vidas.

• Experimentaron mayores niveles de dicha y felicidad.

• Se sintieron más optimistas sobre el futuro y se enfermaron con menor frecuencia.

• Se ejercitaron regularmente y tuvieron más energía, entusiasmo, motivación y concentración.

• Hicieron un gran progreso hacia el logro de sus metas personales importantes.

• Durmieron mejor y se despertaron sintiéndose descansados.

• Se sintieron más fuertes durante momentos difíciles.

• Disfrutaron vínculos familiares cercanos y tuvieron más probabilidad de ayudar a otros y ofrecerles apoyo emocional.

• Experimentaron menos síntomas de estrés.

Si deseas más alegría y energía, la gratitud es claramente una cualidad crucial que debemos cultivar y expresar.

Estas son tres prácticas que puedes empezar a utilizar para abrir tu corazón a la gratitud, la abundancia, la prosperidad y el amor:

Cada día, lista al menos cinco cosas por las cuales te sientas agradecido. Rétate a no repetir los puntos de los días anteriores, esto te hará ver con mayor profundidad las “pequeñas cosas” que mejoran tu vida y te dan alegría, como despertar en una cama cómoda, escuchar tu canción favorita, etc.

Puedes escribir en tu diario antes de acostarte o cuando despiertes en la mañana.

En lo que enfocamos nuestra atención, se expande en nuestra vida.

Haz una lista de al menos cinco personas que han tenido un profundo impacto en tu vida. Elige una y escríbele una carta de agradecimiento expresando tu gratitud por todos los regalos que has recibido de ella. Si es posible, entrega tu carta de agradecimiento en persona.

Aunque a menudo es posible agradecer a las personas de manera verbal, la palabra escrita frecuentemente puede ser aún más poderosa porque alguien se ha tomado el tiempo de escribir su aprecio.

Esta es una práctica particularmente útil cuando te sientes triste o lleno de estrés y preocupación. Dedica 20 minutos (o más si puedes) y camina en tu vecindario, en un parque, alrededor de tu oficina o en algún lugar rodeado de naturaleza. Pon atención a tus sentidos –todo lo que estás viendo, escuchando, oliendo, sintiendo y tal vez incluso degustando–. Y observa cuántas cosas puedes encontrar por las cuales puedes estar agradecido.

Esta es una manera muy poderosa de cambiar tu estado de ánimo y abrirte al flujo de abundancia que siempre está a tu alrededor.