La aleta de seducción de la hembra de los cíclidos

LONDRES. El tamaño sí importa. Por lo menos, así parece ser para los peces cíclidos machos que prefieren a las hembras con aletas pélvicas grandes, según una publicación del portal digital de la BBCMundo.com.

La proporción de las aletas es la clave para que un macho de esta especie decida tener una aventura con una hembra. De acuerdo con una investigación de un grupo de biólogos de la Universidad de Bonn, en Alemania, los peces machos de la especie (Pelvicachromis taeniatus) valoran en las aletas la condición física y el potencial de reproducción. Si las alas tienen buen tamaño es sinónimo de salud y buena sexualidad.

Pero esto no es lo más curioso. Las hembras de este pez, que es originario de África y que es usado para adornar los acuarios, han advertido qué es lo que los machos buscan y se esfuerzan por desarrollar alas enormes y hasta desproporcionadas con el resto del cuerpo. Pero lo mejor es que hacen alarde de este atributo. Para cortejar a la pareja, agitan coquetamente su aleta pélvica.

El descubrimiento es innovador para los investigadores dado que se conoce bastante bien el comportamiento masculino para la selección de la pareja. Sin embargo, no existían muchos antecedentes sobre los hábitos de la hembra durante el cortejo. Y es que la relación del tamaño corporal de las aletas con la sexualidad hasta ahora era algo inimaginable.

LOS HALLAZGOS

La escasez de información llevó a los especialistas a centrar un estudio basado en los efectos de la ornamentación femenina de este pez.

Los científicos, además, hallaron que las enormes alas de las hembras difieren en forma y color con la de los machos. Creen que la inclinación de los machos por las aletas grandes ha influido en el incremento y el cambio de color de las femeninas.