Una loba frente al espejo

Es una tarde tranquila, no se mueve ni una hoja y el sol ya va recogiendo las velas tras el horizonte, me siento con ella y la miro a los ojos. Suspira y comenzamos.

VAMOS A VER. ¿POR QUÉ UNA LOBA? ¿NO TENÍAMOS NADA MÁS AMABLE?

El lobo ha sido temido, odiado, perseguido y acosado por siglos. Nos da miedo porque nos reconocemos demasiado en sus ojos amarillos. Al ser humano no le gusta que le echen en cara sus defectos. Los lobos son demasiado parecidos a los humanos y no se han dejado domesticar. El perro se doblegó y es nuestro amigo. El lobo prefirió su libertad y odiamos lo que eso significa. Definitivamente no quiero ser domesticada, prefiero la libertad.

¿POR QUÉ AÚLLAS?

La injusticia me hace aullar, el que me traten de imbécil, la prepotencia, el descaro y la estupidez humana me hacen aullar.

LA GENTE SE PREGUNTA QUE POR QUÉ SIEMPRE SACAS A RELUCIR LO MALO EN TU COLUMNA. ¿NO ERES CAPAZ DE VER LAS COSAS BUENAS?

Claro que soy capaz. Hay cosas buenas y es muy loable señalarlas y celebrarlas. Pero en una sociedad como ésta, donde los políticos están acostumbrados a que todo el mundo les diga lo guapos y listos que son, y donde decir las cosas de frente es un tabú, se necesita alguien que diga las verdades, aunque éstas duelan. Ser la piedra en el zapato, esa es mi misión al escribir. Puede que haya gente a la que no le guste mi estilo ¡qué puedo hacer!. Siempre tienen la posibilidad de no leerme. +3D