‘La Travesía', un reflejo de la identidad en la cultura congo

Panamá es un territorio multicultural por naturaleza y mayo ha destacado como la ocasión para exaltar el valor de las raíces africanas en el Istmo. Durante el Mes de la Etnia Negra, la Fundación Bahía de Portobelo y la Galería Casa Congo presentan la exhibición ‘La Travesía', un espacio que recoge algunas de las obras pictóricas de los artistas Arturo Lindsay, Yaneca Esquina y la fotógrafa Sandra Eleta, en el Centro Cultural de España-Casa del Soldado.

En la muestra alusiva a la cultura congo, también participan los colonenses Manuel ‘Tatu' Golden, Gustavo Esquina de la Espada y Virgilio ‘Tito' Esquina, junto a los mexicanos Baltazar Castellano y Olga Manzano, con la realización de un mural de 132 metros cuadrados ubicado en el exterior del recinto.

Allí están plasmadas diferentes figuras relacionadas al Cristo Negro de Portobelo, a los diablicos sucios, el Pajarito, hombres y mujeres en actividades de pesca, además de tambores y mujeres congas.

La utilización de colores y formas destaca como un elemento que logra captar la atención de quien lo contempla. De acuerdo con Golden, la obra busca mostrar el sufrimiento de la etnia negra durante su travesía desde África y cómo sobrevivían al racismo de aquellos tiempos. ‘Cada una de estas piezas tiene el propósito de dar una orientación y educar en relación a la historia de la cultura congo', señala.

Eleta manifiesta que esta nueva proyección ha sido una de las grandes muestras que han tenido los pintores del Taller Portobelo. ‘Me siento feliz y orgullosa de ver a cada uno florecer. He sido testigo en todo su proceso creativo y sé lo que significa esto para ellos', comentó, y detalló que los asistentes podrán apreciar unas 30 obras aproximadamente.

EXPONENTES COLONENSES

Golden cobija en sus manos una trayectoria que inició en 1997. En 2002 decidió convertirse en miembro del Taller Portobelo, una iniciativa liderada por la Fundación Bahía de Portobelo, bajo la dirección de Eleta. ‘En mis inicios solo pintaba por diversión. Empecé con rostros de mujeres congas hasta que me vi atraído por la historia. Al involucrarme en el taller empecé a crear obras por vocación', afirma.

En su relato, ‘Tatu' comparte que su admiración hacia el talento de otros le permitió adquirir los conocimientos con los que hoy día cuenta. ‘Mi inspiración nació viendo el talento de otros artistas, comencé a convivir con ellos para aprender, ya que no sabía nada sobre arte. Observando, creando y borrando en un papel desarrollé la práctica paso a paso. Cuando entendí de qué se trata este mundo de la creatividad, me encaminé a crear mi propio estilo', reflexiona.

Para este joven artista, el trabajo es sinónimo del amor que siente hacia sus raíces. ‘Quiero que cuando las personas hablen de mí, se refieran al exponente de las costumbres congo. Porque más allá de darme a conocer, quiero dejar un legado para las futuras generaciones', puntualiza ‘Tatu'.

APOGEO

Si bien la proyección local de la cultura congo aún enfrenta desafíos, De la Espada plantea que las tradiciones afrodescendientes han ganado un claro auge en los últimos años, ‘gracias a los esfuerzos que han realizado diversos grupos que exaltan la etnia'.

Sin embargo, apunta que el cumplimiento del rol del Estado ha sido ineficiente. ‘A nivel nacional el sistema panameño no nos tiene incluidos, ahora existimos gracias al auge que ha tenido la propia cultura'.

De la Espada, también poeta y compositor, reitera que aunque los esfuerzos por promover la cultura continúan, ‘ha sido un gran logro la proclamación que realizó lLa Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, al declarar la cultura congo como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad', un anuncio que hizo el Comité Intergubernamental de esta instancia internacional, en noviembre de 2018, y reconoce que uno de los grandes tesoros de toda nación se evidencia en la riqueza de su cultura y el resguardo de sus tradiciones.