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- 10/08/2024 00:00
- 09/08/2024 19:05
La diputada del circuito 8-2 de San Miguelito convocó un conversatorio para tratar el anteproyecto No. 51, el cual busca oficializar la industria de los deportes electrónicos en Panamá y posicionar a la nación como un líder en la industria de los eSports en Latinoamérica.
En este conversatorio estuvo presente Rodríguez, como distintos grupos de la comunidad gamer de Panamá, quienes dieron a conocer sus puntos, preocupaciones, opiniones y sugerencias de este anteproyecto. Vale la pena destacar que del sector público se hizo presente la Autoridad de los Servicios Públicos (ASEP).
En este acercamiento, se hizo una inspección de manera general y se planea crear un programa de educación para la comunidad gamer, las autoridades, padres de familia, para aquellos jugadores menores de edad y el público en general.
Entre los puntos que se mencionaron estuvieron el acoso que sufren la comunidad gamer, por ello algunos expositores señalaron que entre la misma comunidad existe algún tipo de acoso o de bullying, por lo que se solicitó a la diputada que fueran rigurosos en este tema dentro del anteproyecto.
La comunidad de videojuegos también solicitó que se eduque a la población para que existiera un idioma más coloquial en cuanto a la terminología gamer de algunas palabras y para que todas las personas puedan definir y expresarse adecuadamente sobre los términos de esta comunidad.
Un tema que llamó mucho la atención entre los participantes fue la definición de atleta. Muchos estuvieron de acuerdo con referirse a los jugadores profesionales de videojuegos con otra palabra, sin embargo, otro sector no estuvo de acuerdo con el cambio. Entre las palabras que sugirieron durante el conversatorio fueron atletas pro player o atletas gamers.
Esta comunidad también abrió las puertas a la posibilidad de optar a becas deportivas por parte del Instituto para la Formación y Aprovechamiento de Recursos Humanos (Ifarhu).
Siendo más específicos, los jugadores de videojuegos automovilísticos, quienes solicitaron una certificación por parte de la Federación Internacional del Automóvil (FIA) para que, quizás, en un futuro crear academias que lleven a ese jugador a un nivel profesional real, como lo ocurrido con el GT Academy.
La participación de la empresa privada no se quedó atrás y la comunidad gamer también solicitó un apoyo de este sector para potenciar este ecosistema, crear más eventos que involucre a los jugadores virtuales y hacer de Panamá un epicentro de deportes electrónicos.