Este viernes 20 de diciembre se conmemoran los 35 años de la invasión de Estados Unidos a Panamá. Hasta la fecha se ignora el número exacto de víctimas,...
Samira Gozaine: 'Es imposible conocer la cifra de desaparecidos o muertos en el Darién'
- 17/09/2023 00:00
- 17/09/2023 00:00
La cantidad de personas que han perdido la vida en la selva del Darién rumbo al Norte, es incalculable.
La cifra es casi imposible de definir, según la directora de Migración, Samira Gozaine, ya que los registros con los que cuenta esta entidad no coinciden con las vivencias que relatan los migrantes. Según datos de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) desde el 2014 han muerto o desaparecido 327 personas en esta ruta. Se los traga la selva. Tan solo el año pasado la OIM dio cuenta de 141 personas muertas o desaparecidas.
El Darién es una de las rutas más peligrosas en el trayecto hacia Estados Unidos o Canadá, pero aún así, este año han transitado 252 mil personas, y las proyecciones apuntan que para final de año supere los 500 mil.
No sabremos jamás. Los cuentos de la gente no concuerdan con lo que tenemos reportado. Nosotros tenemos registrados los cadáveres cuando nos notifican. Pero hay quienes reportan, por ejemplo, tres días atrás vi cinco personas muertas; dos días atrás vi a otros tres más. Eso es lo que nos dicen. Tantos casos han pasado que no sabemos.
Se mueren familias completas y nadie los reporta. Hemos tenido testimonios que nos han dicho que cuando suben la loma de la muerte, que es tan difícil, familias completas se tiran. O por ejemplo, en estos días nos reportaron que un hombre que iba con su esposa, ella se cayó y él se lanzó. No hay forma de saber porque es una selva con una geografía muy complicada. Son relatos verdaderos.
No se puede. Hay abismos, despeñaderos.
Sí lo han hecho, pero son 266 kilómetros de selva con varios abismos, son varias trochas, son varios rumbos que cogen y luego se juntan en áreas especiales.
Tenemos ahora 360 mil personas que han pasado, calculamos que para finales de año sea medio millón de personas de continuar el flujo.
Horrible. Ya dijeron que hay aproximadamente 9 mil toneladas de basura que se ha compactado en la selva. Esa cifra la sacan los expertos por la cantidad de gente que ha pasado y los desechos promedio de cada persona.
Ahora mismo está muy complicado. Ahora mismo estamos trabajando en el tema y estamos involucrando al ministro de Medio Ambiente y creo que pronto podremos hablar de otras medidas.
Nosotros no hablamos de que no entre nadie. Es una solicitud de control de flujo lo que pedimos a Colombia. Solo el miércoles pasado ingresaron 3,200 personas a Bajo Chiquito, un pueblo de 300 habitantes y está sufriendo la invasión de sus tierras, que por más que quieran ayudar, ya los rebasaron. Entonces, no estamos pidiendo detener completamente, sino que nos ayuden con la administración. Es un tema de voluntad política. Las declaraciones del presidente colombiano Gustavo Petro muestran una política que respaldan con sus acciones.
¿Cuántos niños están muriendo en la selva? ¿Cuántas mujeres son violadas? Me parece que un niño que muere es un precio demasiado alto a pagar como para pensar que vas a lograr de alguna forma manipular la política exterior de otro país que es soberano de esa medida. No creo que ningún país debe usar a los seres humanos como forma de presión y mucho menos luego de 360 mil personas que han pasado y de ellos el 30% son menores de edad. Son 72 mil niños que han pasado en esa selva, y no sabemos si son sus hijos.
En la película Sound of Silence se representa muy bien el tráfico de niños, cómo los violan, cómo los usan y cómo pasan. No hay forma de saber si los niños son los hijos de los que están pasando con ellos.
No hay manera. Ellos vienen sin papeles. Mi insistencia es con los organismos internacionales, ningún país tiene la capacidad de verificar eso a menos que sea con un examen de ADN y se trata de 72 mil niños. Nosotros no tenemos esa capacidad. Es un tema complicado.
A los niños menores de 12 años no se les hace ese examen. A los que tenemos la capacidad le hacemos ese examen. De las 365 mil personas que han cruzado la selva le hemos hecho biometría a 25 mil, no tenemos capacidad de hacer la biometría a todos, solo a los que perfilamos. El otro día perfilamos a un ciudadano venezolano que es del tren de Aragua, una persona que tiene un récord policivo extenso. A él lo mandamos al albergue de Migración y será deportado próximamente, pero no tenemos la capacidad.
Los están pasando por la selva, están muriendo. La mayoría de los venezolanos que están pasando tienen Estatuto Temporal de Protección de Migrantes (TPS) colombiano. Es decir, tienen residencia de Colombia, pero los están mandando a morir a la selva. Hay que mandarlos vía segura. Los estadounidenses les propusieron establecer un centro donde se registran los migrantes para establecer una vía segura para llegar a Estados Unidos, creo que eso es lo más humano que un país puede hacer en este momento.
Ese papel, el TPS es la prueba de la residencia de los venezolanos en Colombia, se lo da el gobierno. El 70% de los que pasan por aquí tienen TPS, ellos están viniendo a la frontera.
En Colombia todo es un tema de dinero. Los relatos que traen los migrantes es que el mismo pueblo de Necoclí los secuestra y no los dejan salir hasta que les paguen. No se sabe si hay autoridad en el pueblo porque nos han dicho que también ven gente con uniformes de entidades colombianas, así que es difícil determinar qué sucede en el sitio. Es mucha plata la que están cobrando. Les dan un 'kit' por $160 para el trayecto y cuando entran a la selva los asaltan y se los roban, luego se los vuelven a vender. No hay nada humanitario en permitir que sigan pasando los migrantes de esta forma. Creo que todos los países nos hemos dado cuenta de que se trata de un tema de seguridad nacional, no es solo un asunto migratorio. Es descontrolada y sin ningún tipo de normas.
Estuvimos la semana pasada en la Asamblea Nacional y la diputada de Veraguas nos decía que nunca habían tenido migrantes en los semáforos y que se estaban tornando violentos porque la gente no les cooperaba. Vamos a hacer operativos para ponerlos en los albergues.
Es verdad. El ministro de Seguridad, Juan Pino, lo ha dicho públicamente. Como propuesta para ayudar al flujo y viendo el problema que tenemos en la frontera con Costa Rica, que los buses costarricenses pudieran entrar a Gualaca para trasladarlos hasta 10 kilómetros dentro de la frontera de ellos. Propusimos que nuestros buses llegaran hasta Costa Rica a donde ellos lo soliciten para llevar a los migrantes a donde ellos lo soliciten.
Que nosotros los llevemos allá, pero estamos viendo en este momento los seguros internacionales.
Esas son concesiones como los transportes que hay aquí. Es un servicio que ellos dan. Son los concesionarios que tienen la licencia que cuentan con el tránsito. Son 68 dueños de buses que manejan eso y son los que tienen la licencia para operar en Darién.
Ellos están desde el 2014, nosotros hemos continuado con la forma y se aumentó la cantidad de buses. Quisiéramos que salieran 100 buses del Darién a Gualaca, pero salen entre 35 y 50 dependiendo de la disponibilidad y de los dueños de los buses.
En Gualaca los migrantes toman buses locales hasta Costa Rica. Si nosotros los llevamos directamente dentro de Costa Rica los dejaríamos en un centro a 10 kilómetros dentro de Costa Rica. Ahora el problema en la frontera radica en algo similar a lo que ocurre en Darién, hacen sus necesidades en la calle, pelean, y eso está pasando en la frontera. Pero al llegar al centro de Costa Rica tienen Western Union y otras facilidades, a ellos les conviene que los dejemos en Costa Rica.
Creo que Costa Rica es 100% igual que Panamá, miran la tragedia desde otra perspectiva, entendemos que no hay nada humano en la forma en que los migrantes están pasando por el Darién. En la visita que hará a Panamá el ministro de Seguridad de Costa Rica, que junto a su par de Panamá se dirigirán a Darién, puede conocer de primera mano la situación que se vive en la frontera, pueden conversar con ellos y hablar con los pueblos.
Estamos en una posición para administrar los flujos. Con Costa Rica hemos logrado lo que Panamá no ha logrado con Colombia, en el sentido de que compartimos la información para que se preparen y sepan cuántas personas van a recibir. Les pasamos información, les decimos cuántas personas van en los flujos y ellos se preparan con sus buses del otro lado para poderlos atender. Les dan agua, alimentación y que puedan continuar su viaje.
Nosotros los llevamos hasta Chiriquí y les podemos decir con precisión cuántas personas van a pasar. En Gualaca estas personas no duran ni siquiera 24 horas. Pero no imponemos cuotas.
Hago la aclaración de que estas medidas no se han cambiado. La ley establece desde el mínimo de 15 días hasta 90 días. Algunas nacionalidades tienen derecho hasta por seis meses.
Se dijo que para luchar contra el crimen organizado por el reforzamiento del Servicio Nacional Aeronaval (Senan) y del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) que imponen nuevos bloqueos, iba a conllevar a que las personas iban a optar pasar por los aeropuertos como en efecto ha sucedido.
La semana pasada arribó un grupo de ciudadanos ecuatorianos que no cumplían con perfiles de turista y que iban a transitar por el aeropuerto hacia México y que fueron inadmitidos en el aeropuerto de Tocumen. Ellos iban a empezar a caminar desde Panamá a México. Pero qué pasa si los empiezan a devolver como ocurrió el año pasado los empiezan a devolver, generan crisis en el país.
Lo que estamos haciendo es notificar a las personas que vamos a iniciar a solicitar a cierto perfil de gente que tiene que traer una suma mayor de dinero. Tenemos que empezar a ser serios en nuestros argumentos, dejar la politiquería de esto, este es un tema de Estado. Un turista real no viene a un país con $500.
El día lunes en el aeropuerto detuvimos a un grupo de 15 ecuatorianos que iban a hacer tránsito pero realmente eran migrantes. En su declaración dijeron que el anuncio de las medidas de deportación que se había emitido les iba a impedir pasar por la selva, que no se iban a arriesgar. Esos vuelos que vamos a contratar son cinco chárter de 35 personas cada avión por una aerolínea panameña y nos cotizaron los cinco vuelos en $78 mil. Recuerda que nuestra capacidad en Darién para retener a las personas no es mucha.
No lo dejamos pasar porque ya pasó con los venezolanos. Cuando el flujo se regresa de norte a sur al país que afecta es Panamá. El año pasado tuvimos 10 mil venezolanos atrapados en Panamá. Vinieron de México, Nicaragua y Costa Rica. Algunos habían ingresado a Estados Unidos, pero los devolvieron a México.
La movilidad está muy mal entendida. Es de derecho, pero tienes que cumplir con los requisitos. No puedes entrar a Estados Unidos sin cumplir con los requisitos. ¿Qué pasa cuando los países los devuelven al aeropuerto? Nosotros el mes pasado tuvimos una crisis de 144 personas inadmitidas por México que hicieron tránsito en Panamá y las devolvieron. Nosotros no tenemos la capacidad para manejar esas situaciones en el aeropuerto.
Como cuando vas a algún lado y no cumples con los requisitos no te dejan entrar, entonces te quedas en un área internacional a la espera para ser devuelto. Esto fue el mes pasado y el anterior cuando tuvimos varias crisis. Una semana tuvimos 144 personas devueltas de México y en otra tuvimos 146 personas.
Estas personas venían en un vuelo de extracontinentales, iban en tránsito, pasaron por Panamá, siguieron a México y ellos vieron el perfil. Sabían que eran migrantes irregulares y no eran turistas y los devolvieron a su país de origen vía Panamá, por ser país de tránsito. Nosotros tenemos un hub internacional. Tuvieron que venir al aeropuerto de Panamá en vuelo de Copa, pero desde aquí no hay muchos vuelos hacia sus países. Mientras que esperaron estaban en una sala especial en la que los debimos tener, les dimos comida, las aerolíneas se encargan de esto. Nosotros nos aseguramos de que nada les pasara, que no se escaparan, porque ellos no venían a Panamá, sino a México. Estaban en la sala de espera, tuvimos que poner personal de custodia. Cuando esas personas pasan por esa situación están custodiados por la aerolínea, ni siquiera por Migración porque no han ingresado a Panamá.
Los quince días y el dinero son para la gente que dice que viene de turismo, pero en realidad se quedan a trabajar, no pagan impuestos. Entran y salen cuando se les acaba el plazo. Los perfiladores los tienen identificados por el movimiento.
Nosotros estamos empeñando más personal para reforzar los operativos. Recuerda que el personal que tiene Senafront es limitado, al igual que el que tiene Migración, estamos empeñando más hombres en una misión migratoria, una tarea que no es del personal de Senafront pero que la situación obliga a hacerlo.
Recientemente rescatamos a 153 personas que estaban siendo traficadas en seis lanchas, la mayoría de los aprehendidos eran colombianos. Esas personas fueron rescatadas de los coyotes y a los traficantes los llevaron ante la justicia para enfrentar sus procesos.
El crimen organizado tiene personas en todos los países. Los dejan aquí y los que siguen los llevan al resto de la ruta. Nosotros mantenemos a los migrantes mientras dan sus declaraciones antes la Fiscalía y luego les permitimos continuar el trayecto, pero sin traficantes.
Detener a los traficantes. Lo hemos dicho, Panamá no tiene la capacidad física para detener a todos los traficantes, eso lo tiene que hacer Colombia.