Evalúan respuestas para damnificados por vendaval

Por segunda vez en menos de 15 días, un fuerte vendaval azotó las comunidades de Divalá y Nuevo México, distrito de Alanje; y Corotú Civil, distrito de Barú, provincia de Chiriquí.

La situación, ocurrida la tarde del pasado lunes, dejó como saldo 82 viviendas afectadas por el desprendimiento total o parcial de sus techos.

José Donderis, director Nacional de Protección Civil (Sinaproc), informó que un total de 66 casas fueron afectadas por el mal tiempo, que dejó 345 personas afectadas (157 adultos, 185 niños y nueve lactantes).

Donderis detalló que unas 280 personas fueron afectadas en el área de Divalá, 27 en la comunidad de Nuevo México y 38 en Corotú Civil.

Al lugar acudió personal de instituciones como Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial (Miviot), Cruz Roja, Alcaldía de Alanje, Ministerio de Desarrollo Social (Mides), Despacho de la Primera Dama, Policía Nacional y Sinaproc.

En el albergue instalado en la Junta Comunal de Nuevo México, se hizo entrega de alimentos y ropa y se ofreció atención a las personas afectadas.

El gobernador de la provincia de Chiriquí, Hugo Méndez, coordinó con las instituciones la ayuda que se llevará a las personas cuyas viviendas quedaron sin techo.

Por instrucciones del Gobierno central, se procederá a ayudar a las personas afectadas porque el viento levantó el techo de sus viviendas, la mayoría construidos de cañazas.

El funcionario mencionó que debido a la fuerza de los vientos, una palma le cayó a dos mujeres, una de 65 años y la otra una joven embarazada de 19 años. Esta última presentó ataques de histeria y tuvo que ser trasladada de urgencia al Hospital Regional de David, para atenderse las lesiones.

AFECTACIONES

El vendaval esta vez alcanzó tres autos dentro del Instituto Profesional y Técnico de Divalá, que dejó daños debido a la caída de árboles dentro del plantel educativo, lo que motivó la suspensión de las clases en ese colegio durante la jornada vespertina desde ayer.

Por instrucciones del gobernador Méndez, se habilitó la Junta Comunal de Nuevo México para atener a unas 30 personas seriamente afectadas por el temporal.

Ayer continuaban las labores de evaluación de daños y análisis de necesidades, que se realizan de forma coordinada entre la Gobernación, el Miviot, el Ministerio de Obras Públicas, alcaldías y representantes de corregimiento para darle una pronta solución a los daños causados.

Materiales como hojas de zinc, carriolas y tornillos, fueron trasladados por el equipo del Miviot a las familias cuyas casas fueron afectadas parcialmente.

CENTRO DE ACOPIO

Se habilitó el parque recreativo de la Policía Nacional, en David, como centro de acopio para recibir apoyo de la comunidad en agua embotellada, comida enlatada, ropa de niños y adultos, frazadas, cuadernos y útiles escolares, para llevarles a los afectados.

Recientemente, se registró igual situación en Divalá, por lo que los moradores temen que esta situación se repita.

En aquella ocasión el embate de la naturaleza dejó unas 29 viviendas con techos desprendidos, 110 personas sin hogar y árboles caídos en la vía entre Alanje y Divalá.

Margarita Armuelles, corregidora de Los Limones, en Divalá, explicó que organizaron a los moradores para darles protección mientras se soluciona el problema de sus viviendas.