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Covid-19 dispara la cifra de homicidios en 2020
- 07/12/2020 00:00
- 07/12/2020 00:00
La pandemia causada por la enfermedad del coronavirus ha desatado una profunda crisis económica y social, con altos niveles de violencia. A esa conclusión llegan expertos en las ciencias forenses y criminología al darle lectura a las estadísticas de homicidios del Ministerio Público y la Policía Nacional.
El criminólogo Marco Aurelio Álvarez aseguró que con la pandemia las actividades del crimen organizado no se detuvieron y por el contrario aumentaron con un alto ingrediente de violencia que califica como la “predación criminal”.
La expresión es una ideología de la muerte en que se infunde un régimen de terror. De esta manera se genera una especie de mecanismo sociológico para provocar el código del silencio a los miembros de la organización, donde además se marca el territorio del mercado de la droga u otra actividad criminal.
“Este año la cuarentena le ha allanado el camino a los asesinos porque saben dónde están ubicados sus contrarios y por estar las calles más despobladas les es más fácil huir de la escena del crimen”, destacó Álvarez.
Vicente Pachar, aunque no es especialista en el estudio del comportamiento criminal, en su labor como médico forense ha logrado encontrar las causas de los homicidios.
En su reflexión sobre el tema coincide con Álvarez y considera que el aumento de estos casos se le atribuye “al incremento de la violencia de grupos marginales de la sociedad” haciendo alusión a las pandillas y grupos de narcotraficantes.
Como la mayoría de los homicidios se producen con arma de fuego puede atribuirse al crimen organizado porque son quienes tienen facilidades para obtener estos artículos en el mercado ilegal.
Sin embargo, las estadísticas revelan una lectura más alarmante al demostrar “que el país está más armado de lo que nos imaginamos, es decir, aquí hay un tráfico ilegal de armas muy grande”, considera el estudioso en criminología.
Otro punto que destacó el especialista es que de las 41 mujeres que han sido asesinadas 15 fueron calificados femicidios, el resto, que son la mayoría, se atribuye a muertes violentas.
“Esto demuestra que la participación de la mujer en el crimen organizado es cada vez más frecuente”, indicó Álvarez.
Este año dos hechos acapararon la atención de la opinión pública, que fueron calificados como crímenes atroces. Se trata de los asesinatos de siete personas a manos de una secta religiosa en la comarca Ngäbé Buglé y el hallazgo de otros siete cuerpos dentro de un búnker en Colón.
A inicios del año 2020 se dio el hallazgo de una fosa común donde se encontró una escena dolorosa: cinco niños brutalmente asesinados y su madre que estaba embarazada. Las investigaciones arrojaron que los autores del horrendo crimen eran familiares cercanos de las víctimas y líderes de una secta religiosa denominada “La nueva luz de Dios”, en la comarca Ngäbé Buglé.
Enero es el mes con más homicidios con 65 casos, 22 más que en el mismo mes que el año pasado. Los especialistas atribuyen este incremento a lo ocurrido en la comarca y a la masacre de La Joyita que se dio en diciembre del año pasado, pero tuvo un impacto en la escalada de homicidios en la provincia de Panamá Oeste, específicamente en el distrito de Arraiján.
Mientras que en el mes de julio, según las estadísticas, es el segundo con más homicidios en lo que va del año con 49 casos, esto podría estar atribuido a la masacre del Bunker en Espinar, provincia de Colón, cuando siete jóvenes fueron ejecutados.
El año 2019 cerró con 480 homicidios y fue el mes de diciembre el que elevó las cifras con 73 casos, esto se le atribuye al movimiento comercial que genera las fiestas de fin de año. Las autoridades se preparan para evitar que se repita este fenómeno para el mes de diciembre 2020.