André Conte: El problema de la justicia en Panamá está en el sistema

Hace pocas semanas el joven André Conte fue declarado no culpable en un proceso judicial donde se le señalaba de haber hackeado a la Policía Nacional y al Ministerio de Educación (Meduca). Se trataba de dos delitos graves, el primero contra la seguridad informática y el otro contra la personalidad internacional del Estado.

Conte, de 28 años y activista en temas ambientales, habló este miércoles en “Portada” de La Estrella de Panamá sobre su caso y el problema de la justicia en el país. “Me preocupa la gente que no tiene oportunidad de una defensa acorde”, dijo.

El activista explicó como fue detenido en su casa en enero de 2021 y las restricciones que enfrentó, en particular la desconexión obligatoria de aparatos tecnológicos y redes sociales. Manifestó que inclusive tuvo que cambiar de profesión mientras duró la causa; pasó de ser ingeniero informático a carpintero.

Comentó que aunque su caso se elevó a causa compleja –lo que ampliaba el periodo de investigación–, nunca se hallaron pruebas contundentes en su contra. Recalcó que, por el contario, estuvo plagado de irregularidades por parte de la fiscalía.

Conte explicó que en el proceso se le intentó vincular sin éxito a Anonymus, nombre asociado a diversos grupos de hackers que operan en células desconexas unas de otras, y que han sido protagonistas en otros países de ataques informáticos a instituciones públicas y privadas.

El fallo tiene 86 páginas, en el que 75 hacen referencia a como los peritos mintieron, se equivocaron e hicieron las cosas mal, señaló el joven. Indicó que pese a que el sistema de seguridad de Meduca no tenía registros de que él habían ingresado, se intentó “meter evidencia manipulada” que al final no fue tomada en cuenta por la jueza.

“Hasta declararon evidencias ilegales en este caso. De repente el fiscal sacaba un correo impreso sin ninguna forma de verificar. Aquí se dieron los errores más grandes que se pueden cometer en una investigación”, dijo.

A lo anterior se suman los gastos del proceso. Donde no solo hubo afectaciones a su libertad, sino también económicas. Al final su familia y amigos asumieron el costo de su defensa, que les llevó a pedir préstamos.

Tras conocerse el fallo de no culpabilidad, Conte manifestó que quiere retomar sus estudios que se vieron truncados por este proceso.

Conte no descarta que pudo haber “intenciones” de afectarlo con esta querella y esa sería la única explicación de porqué el proceso no se desestimó. Atribuyó las graves fallas al sistema de justicia. “Creo que hubo personas que se equivocaron, otras actuaron con maldad, y también hay un poco de las dos”, recalcó.