El número de víctimas mortales por la dana en la provincia de Valencia se eleva a 212, de las que 183 están ya plenamente identificadas, según el último...
- 31/01/2024 00:00
Los desconocidos ciclos de las sequías
Viajaba en un bus de Las Tablas a Chitré. En la parada de La Villa de Los Santos subió un amigo, quien de inmediato, me entabló una amena conversación. Quisiera saber, se preguntaba... ¿En qué “hueco” del inmenso mar “se esconde” el viento norte?; porque sobre todo, para octubre y noviembre no sopla.
Le respondí. No soy astrónomo. Pero he leído los siguientes. A partir de cada mes de enero, la Tierra viaja en la misma dirección en que viaja el Sol, colocando el hemisferio norte como proa. El Sol, en su avance, va desplazando vientos, con los cuales se enfrenta el hemisferio norte de la Tierra. A estos vientos les llamamos “vientos norte”. En marzo, la Tierra aumenta su velocidad en el espacio a 45-60 kilómetros por segundo. Aumentan también el viento norte. En esos meses de “verano” o temporada seca, la Tierra tiene que aumentar su velocidad, porque el 21 de junio la Tierra tiene que cruzar la órbita del Sol y no chocar con el astro rey.
Hablamos de las sequías y de la gran sequía de los tres veranos. Con toda convicción me afirmó que la sequía de los tres veranos se presentó en el año 1813. Con esta afirmación iniciamos una investigación.
Está reportado que para 1933 se presentó una sequía, la cual puso en dificultades el tránsito por el Canal de Panamá. Los gringos se vieron en la necesidad de construir el lago Alajuela para suplir las aguas del lago Gatún, para los tiempos de sequías. Entre el año de 1813 y el de 1933 tenemos un lapso de 120 años.
Hace 456.000 años, el año tenía 360 días. Y el ciclo lunar de 1260 días equivalía a 3.5 años. Nos encontramos entonces, que los 120 años, entre el 1813 y el 1933, equivalen a 34.28 ciclos lunares de 3.5 años.
En 1967, en Azuero se presentó una sequía. Los gringos, con sus avionetas, bombardearon, con nitrato de plata, las pocas nubes que se formaban; pero no se provocaron lluvias.
Entre 1933 y 1967 tenemos una diferencia de 34 años. Y 10 ciclos lunares de 3.5 años suman 35 años.
En 1997 se presentó otra sequía. Entre 1967 y 1997 tenemos 30 años de diferencia. Y nueve ciclos lunares corresponden a 31.5 años.
En el 2023 se ha presentado una sequía que se prolongará durante este año 2024.
Entre 1997 y el 2023 tenemos 26 años. Siete ciclos lunares de 3.5 años resultan 24.5 años.
Finalmente, de 1813 a 2023 tenemos 210 años de diferencia. Y en 210 años tenemos 60 ciclos lunares de 3.5 años.
¿Coincidencias?
¡No! Los ciclos lunares de 1.260 días, que equivalen a 3.5 años, están muy relacionados con las sequías.
¡Lamentablemente, los científicos desconocen, totalmente, el ciclo lunar de 1.260 días; a pesar de que está enunciado en el versículo tres, del capítulo once del bíblico libro del apocalipsis o revelaciones y en el ancho interno del mal llamado “sarcófago” de la pirámide de Kefrén, el cual mide 1.260 milímetros absolutos!