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- 19/10/2015 02:00
El caso de los pinchazos
Objetiva y valiente la decisión del magistrado Harry Díaz de iniciar encausamiento penal contra Ricardo Martinelli Berrocal por la comisión de delitos contra la inviolabilidad del secreto y el derecho a la intimidad y contra la administración pública, en perjuicio de ciudadanos de este país. No hay duda de que se trata del primer paso en firme que se da para juzgar al presidente más corrupto de la historia nacional, como lo vine denunciado desde los inicios de la gestión, lo que me valió el mote de ‘loco ', la eliminación de mis artículos de opinión de un diario local y que muchos empresarios se alejaran de mí cuando me veían en sitios públicos, para que no se pensara que comulgaban con mis denuncias.
Lamentablemente, la solicitud del magistrado Díaz va a morir en la cuna, dada la estrecha relación que existe entre el exmandatario y la mayoría de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia. Nadie duda de que la máxima entidad de Justicia panameña está carcomida por la corrupción, al punto que hay, incluso, magistrados que están siendo investigados por el FBI. El caso más reciente es el del magistrado Ayú Prado, a quien se le separó de ser el protagonista principal en el caso de Financia Pacific, por haber participado de esos ilícitos, y ese sujeto todavía es magistrado; es decir, es magistrado, a pesar de haber participado en otro acto de corrupción. Por otra parte, resulta absurdo que estos señores aún no hayan exigido la comparecencia de Martinelli Berrocal para que responda a todas las denuncias y se presten para el juego de los abogados del diputado del Parlacen, con la única finalidad de dilatar el proceso.
Los panameños nos encontramos en un estado de indefensión. Los fallos de la Corte se dan a favor de los que llevan los maletines más llenos de dinero o por los afectados que más influencias tienen. Hemos vuelto a la época de la dictadura militar, en donde los fallos se dirimían en el cuartel central. Y a todo esto, ¿qué hace el presidente de la República? Nada. Su inacción lo convierte en el principal cómplice de lo que está ocurriendo en la Corte Suprema de Justicia.
Naturalmente que Varela no puede destituir a los magistrados. Eso no se lo permite la ley. Inicialmente, en un acto mediático, le solicitó la renuncia a Ayú Prado, pero en el camino se olvidó de esa petición, lo que ha abierto en la población una grieta grande por donde entran muchas dudas, la más grave es: ¿todavía mantiene su relación con el expresidente? Recordemos que participó en el Gobierno pasado durante 26 meses y que fue partícipe de los actos de corrupción, por acción u omisión. O será que Martinelli Berrocal le tiene un expediente, que de sacarlo puede terminar en su destitución.
Recordemos que de acuerdo a los ‘wikileaks ' filtrados del departamento de Estado (ID 221878. Fecha: 2009-08-22 14:16:00, origen 09PANMA639. Fuente: embajada Panamá. Clasificación: SECRETO/NOFOR. Destino: VZCZCXYZ2000. Tema: búsqueda de Martinelli de pinchazos muestra el lado oscuro del nuevo Gobierno panameño) los que participaron en la solicitud de los pinchazos a la embajadora de los EE.UU., Barbara Stephenson, fueron Ricardo Martinelli Berrocal, Demetrio Papadimitriu, Jaime Trujillo, José Abel Almengor y Juan Carlos Varela, vicepresidente y canciller. El 2 de octubre de este año cuando comparecí al despacho del magistrado Harry Díaz a ratificarme de la querella interpuesta a Martinelli Berrocal, a través de mi abogado, licenciado Carlos Herrera Morán, le entregué copia de los ‘wikileaks ' en inglés, con la traducción al español por una traductora pública autorizada.
Pero ¿qué puede hacer Varela si de verdad quiere que en nuestro país se depure la Corte Suprema de Justicia? Hacer valer el articulo 2 de nuestra Constitución que a la letra dice: ‘El Poder Público solo emana del Pueblo '. Sobre la base de este artículo constitucional debe convocar a un referéndum para que los panameños decidamos si queremos que los actuales magistrados continúen o no en sus puestos, y además, que el pueblo determine cuáles deben quedarse y cuáles irse. De no hacerlo y si a Martinelli Berrocal no se le trae al país a encausarlo y no queda detenido, como lo establece la ley, Juan Carlos Varela será el responsable directo de esa impunidad.
Señor Presidente: Vístase con pantalones largos.
MÉDICO