El compromiso de CAPAC con la educación

El derecho de aprender es impostergable y se inscribe no solo por norma constitucional, es también parte fundamental de la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, más conocida como Pacto de San José y de la Convención sobre los Derechos del Niño. Por ello, la ecuación de enseñanza y aprendizaje para lograr una formación profesional que permita alcanzar un empleo decente, es uno de los mayores desafíos que debe enfrentar la sociedad en su conjunto.

El problema es que el rendimiento escolar se compromete cuando el tejido social es débil y la participación familiar es deficitaria para alentar y apoyar al alumno a fin de que mejore su rendimiento. Esto se agrava cuando el estudiante crece en un entorno social de riesgo que lo hace vulnerable a la delincuencia, la drogadicción y otros vicios.

El resultado es altos porcentajes de ausentismo, bajo rendimiento en el aprendizaje, repetición de grados y abandono temprano del sistema educativo, con la consecuente incidencia en el desempleo y la pobreza.

Desde el sector público y privado, con el acompañamiento de la sociedad civil y de los gremios organizados en su conjunto, deben tomarse medidas adecuadas para enfrentar este doloroso panorama. Es una responsabilidad ética ineludible que los niños y jóvenes que viven en condiciones excepcionalmente difíciles merezcan una consideración especial e igualdad de oportunidades.

En la actualidad la Cámara Panameña de la Construcción (CAPAC) propugna por un sistema educativo más equitativo y en el que las variables socioeconómicas no sean lo determinante en los procesos para lograr una calificada formación técnica y profesional.

Es por eso que el gremio de la construcción se concentra, en la medida de sus esfuerzos, en lograr innovaciones tangibles en el sistema educativo nacional. De allí que la iniciativa del programa de becas de la CAPAC revista singular importancia pues sus objetivos están enfocados a reducir la deserción escolar y promover la educación técnica en profesiones relacionadas con la industria de la construcción.

Este programa, que tiene ya tres años de haberse puesto en marcha, alcanzó en su primera etapa a estudiantes del área metropolitana, con excelentes resultados. En su segunda fase se ha hecho extensivo al resto del país incluyendo las provincias de Bocas del Toro y Darién, regiones donde el rezago educativo es más notorio. En ese contexto, la acción de la CAPAC involucra a los institutos profesionales y técnicos de todas las cabeceras provinciales.

En un acto protocolar realizado recientemente en la sede de la CAPAC se llevó a cabo la firma de los convenios del programas de becas, con los directores de las instituciones comprometidas con el gremio de la construcción, en la selección de los estudiantes con buenos promedios escolares.

Los alumnos escogidos son aquellos que han finalizado el noveno grado y que tienen por énfasis carreras, tales como: bachiller en construcción, soldadura, plomería, electricidad y otras profesiones afines.

El apoyo que se les brindará es un aporte económico mensual y una opción preferencial de trabajo al concluir su carrera. El compromiso del estudiante es mantener notas por encima de las de pase, cumplir con el reglamento escolar y mantener normas de conducta en la que resalten los valores sociales y cívicos.

Este programa de becas de la CAPAC es un aporte valioso dentro de la urgencia por un debate pedagógico sobre el estado del sistema educativo nacional.

Cabe resaltar que existe la imperiosa necesidad de estimular en los estudiantes el ejercicio del pensamiento autónomo, crítico y racional, que cuestione y busque respuestas, que sea cada vez más productivo, creativo y que persiga el mayor conocimiento posible.

Una propuesta de esta dimensión debe contar con las herramientas tecnológicas de la información y de la comunicación, sin dejar de lado todo lo que atañe a la formación técnica y profesional. Esta una de las áreas con mayores carencias dentro del sistema educativo, razón por la cual la CAPAC considera que para lograr mejoras significativas, deben hacerse mayores esfuerzos por parte de los sectores públicos y privados, junto con la sociedad civil y todos los gremios organizados.

La asignatura pendiente es lograr mediante una acción concertada que la niñez y la juventud panameña, que carecen de igualdad de oportunidades, puedan alcanzar un futuro promisorio y esperanzador.

Director General de la Cámara Panameña de la Construcción