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- 02/11/2023 16:55
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El diputado, Leandro Ávila no imaginó nunca que referirse al progreso de Penonomé, capital de la provincia de Coclé, le costaría la declaratoria de persona “no grata” del distrito.
“Vayan a Penonomé”, recomendó el diputado, en una sesión de la Asamblea Nacional. “¿Qué era Penonomé hace 15 años?”, preguntó. Él mismo respondió: “Un pueblito chiquito, que a las 6 de la tarde todo el mundo tenía que irse a dormir. Vayan a verlo ahora, que es el desarrollo, que es el progreso, pero eso no le basta a la sociedad, a la juventud…”, que exige declarar inconstitucional la Ley 406, para operar la mina Cobre Panamá, que está ubicada en el Caribe de Panamá.
Paula González, alcaldesa del distrito, ripostó estos comentarios en su red social de Instagram. Con tono irónico dijo: “Hemos escuchado las grandes palabras del diputado. ¡Bravo, bravísimo por eso!”. Y procedió a decirle al “estimado” diputado porque ya no sabía si llamarle “honorable” que era un “irrespetuoso de primera mano”, al referirse al distrito de tal manera.
Le aclaró que si su distrito crecía no era por la actividad minera sino por su gente. “Gente noble, hombres y mujeres que 24 horas llevan el esfuerzo de su trabajo a su casa”.
A la mina la calificó como un “mal vecino” que solo ha dejado “migajas”, que no se aprecian en ningún lugar del distrito. Lo único que ha dejado la mina – dijo la primera autoridad del distrito – es calles con huecos, hospitales sin asistencia médica, centros de salud sin abastecimiento, responsabilidad social cero, “nula”, aclaró.
González – visiblemente indignada – aseguró que el distrito está sufriendo un daño ambiental, como consecuencia de las operaciones de la mina. El diputado, sin embargo, no lo sentía porque vivía en San Miguelito. Y probablemente eso era mucho mejor: “Viva en San Miguelito y sea feliz allá”, le recomendó, como para no decirle que no se acerque por Penonomé.
Aprovechó para reclamarle que intentó que los incluyeran en la discusión de la Ley 406, pero no lo permitió.
No contenta con esto, lo reto a responderle, ¿dónde estaba el progreso de la mina? “No hay potabilizadores, se va la luz y se va el agua. Si llueve se va el agua y si no también”, explicó. “¿Dónde está el impuesto que la mina ha dejado en Penonomé?, reclamó la alcaldesa. “Cero”, respondió ella misma.
Dicho esto, repitió que el diputado era un “irresponsable”, “un mentiroso …, uno más como cada diputado del PRD (Partido Revolucionario Democrático)”. Lo instó a renunciar si estaba agotado. “Váyase a su casa, que nadie lo va a extrañar”, le dijo.
Seguidamente le anunció que, en el distrito, “en esa noble ciudad”, “en ese gran lugar”, “en ese centro del país llamado Penonomé”, era “non grato”. Para último, - y como para que le quedara claro - le repitió que se había equivocado, “señor Leandro Ávila”. La mina solo ha dejado problemas. “Ocuparse de lo suyo”, le ordenó la alcaldesa.