Tráfico de influencias, el gran desafío por vencer en la Corte Suprema de Justicia

La elección de la magistrada María Eugenia López, como presidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), ha puesto sobre el tapete el polémico tema del tráfico de influencias en la máxima corporación de justicia, un flagelo que algunos juristas no lo ven como una simple percepción sino como una realidad que se ha venido dando por años.

¿Acabará o tratará de minimizar la nueva presidenta de la Corte Suprema de Justicia con el tráfico de influencias en el Órgano Judicial? Ese el principal cuestionamiento de algunos juristas sobre el tema.

El más reciente episodio que generó suspicacia sobre presuntos actos de tráfico de influencias en la Corte se dio a conocer en octubre de 2021 cuando circuló en redes sociales un audio de una conversación entre la ex viceministra de la Presidencia, María Fábrega y el ex ministro de la Presidencia, Jimmy Papadimitriu.

En la conversación, cuya fecha precisa se desconoce Fábrega y y el ex ministro conversan aparentemente de un proyecto de fallo que estaba elaborándose en ese momento en la Corte, en el que presuntamente estaban haciendo el "lobby" con uno de los magistrados para lograr una decisión favorable en un caso.

"Sabes como yo me sentiría tranquila... cuando ya yo sepa que el borrador está corriendo", le decía Fábrega en el audio al ex ministro.

Más adelante en la conversación Fábrega decía, "cuando ya salga de allí, el otro que es más cercano mío, yo le voy a decir, fírmame eso rápido". 

María Fábrega es hermana del ex magistrado Luis Ramón Fábrega, quien apenas culminó su periodo de 10 años el 31 de diciembre de 2021.

En el audio la ex viceministra también comentaba que: "lo malo es que esa gente allá adentro (en la Corte), esa es una mafia, entonces negocian todo". 

En su momento la conversación fue confirmada por Fábrega en su cuenta de twitter e indicó que no recordaba en qué año fue ni el tema y que no estaba en el gobierno y que todo lo que hacía era ayudar a un amigo a impulsar un proceso, "así como muchos quieren, incluyendo los que critican".

Para el abogado Gonzalo Moncada, el tráfico de influencias en la Corte Suprema de Justicia no es una figura fantasma, sino que es una realidad. 

No obstante, señaló que la presidenta de la Corte, María Eugenia Fábrega en poco tiempo ha hecho cosas que nadie se ha atrevido a hacer como declarar vacantes posiciones como las de jueces de garantías, de juicio oral y de cumplimiento del Sistema Penal Acusatorio (SPA) y los defensores públicos. Los va a someter a concurso como lo establece la Carrera Judicial.

"Me parece que tiene buenas intenciones, yo creo que ella va a hacer las cosas bien. Yo sí sé que se han dado casos de tráfico de influencias, y se han dado muchísimos, toda la vida ha sido así", exclam´ó Moncada. 

No obstante, destacó que está muy optimista con la magistrada López y las nuevas magistradas que ingresaron. "La magistrada López sola no es mayoría, habrá que ver el comportamiento de los cinco que hacen mayoría, pero yo sí creo que se va a sanear un poco", aseguró.

Por su parte, el también jurista Ernesto Cedeño manifestó que tráfico de influencias y cualesquiera irregularidades que pudieran gravitar en la Corte o en el poder judicial, se pueden minimizar en la medida en que la Corte sea más transparente.

"Eso se logra implementando las auditorías en los despachos, no tan solo en los inferiores, sino también en los despachos superiores para que así uno se pueda dar cuenta si hay algún magistrado que está engavetando causas, porque solo se necesita que un magistrado se siente en un expediente para paralizar todo, esperando una motivación extra o ver el momento apropiado para convencer a sus homólogos", señaló Cedeño.

Con la llegada de la nueva presidenta de la Corte, Cedeño fue enfático en señalar que honrar honra, al destacar que la nueva junta directiva del Órgano Judicial ha dado luces de que las cosas pueden ir por un buen camino, al anunciar la motivación de aplicar la Carrera Judicial.

Pero enfatizó que se requiere más. "Se requiere mayor actividad y mayor click con la sociedad para que no solo estas cosas se resuelvan, sino también los expedientes que están engavetados".

"No hay explicación de que un expediente tenga cinco años o más en la Corte Suprema de Justicia. Qué tiene que hacer la Junta Directiva... vamos a empezar a minimizar la mora judicial; estamos hablando de tráfico de influencias, estamos hablando de qué es lo que está sucediendo y si alguien está empujando para que salga o que no salga un expediente. ¿Esas cosas cómo se depuran? Con la veeduría ciudadana y con otras acciones", destacó.

En tanto, el analista político José Eugenio Stoute indicó que la llegada de María Eugenia López a la Corte, y con posterioridad a la presidencia del Órgano Judicial, produce un cambio de extraordinaria importancia en el funcionamiento de ese órgano del Estado.

"Prueba de ello es la decisión de la interinidad de magistrados y funcionarios que no fuesen de Carrera Judicial, aperturando en condiciones de igualdad los concursos para ocupar esos puestos", destacó.

Solo esa decisión precisó, nos advierten de que algo importante se está produciendo en el Órgano Judicial.

Stoute no duda en que la nueva mayoría en la Corte producirá un mejoramiento significativo en el funcionamiento en ese órgano, y se mejorará la calidad ética de la conducta de sus funcionarios, lo que asegura, se percibirá también en sus fallos.