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Lista gris del MOU de París obliga a Panamá a perfeccionar su registro de buques
- 28/06/2023 00:00
- 28/06/2023 00:00
Que la Marina Mercante panameña fuera incluida en la lista gris del Memorando de Entendimiento (MOU) de París generó preocupación dentro del sector logístico.
Expertos coinciden en que esta situación obliga aún más a Panamá a esforzarse por tener un registro de buques de primer mundo ante las “deficiencias” que fueron detectadas dentro del propio sistema. A esto se suma que también debe enfocarse en buscar los mecanismos que le permitan salir en un corto plazo de la lista del MOU de París.
El MOU de París es un organismo que lleva a cabo más de 17.000 inspecciones a bordo de barcos extranjeros en sus puertos para asegurar que cumplan con los estándares internacionales de seguridad, protección y medio ambiente, y que los miembros de la tripulación tengan condiciones de vida y de trabajo adecuadas. Su principio básico es que la responsabilidad inicial del cumplimiento de los requisitos establecidos en los convenios marítimos internacionales recae en el armador, por lo tanto, el compromiso de garantizar dicho cumplimiento sigue siendo del Estado del pabellón.
La presidente de la Cámara Marítima de Panamá (CMP), Yira Poyser, mencionó que para el gremio se hace imperativo continuar trabajando de la mano con las autoridades sobre los distintos proyectos de actualización a las normas o procedimientos del abanderamiento de naves en la Marina Mercante.
La posición, según Poyser, es seguir salvaguardando el liderazgo que tiene Panamá en el abanderamiento de buques, el que, tal vez, otros países anhelan.
“Debemos demostrar unidad como país y sentarnos a buscar las soluciones necesarias para trabajar juntos y fortalecer el cumplimiento de las normas que son las que quizá nos llevan a tener un poco de debilidad para caer en estas listas”, reconoció la presidenta de la CMP.
“Hay que seguir los controles en caso de ser necesario y hasta reglamentar el mecanismo que permita a la Autoridad Marítima de Panamá (AMP) ejercer más fuerza sobre los casos de incumplimientos a las normas internacionales, que rigen nuestra actividad”, añadió.
Para Francisco Carreira Pittí, abogado especialista en temas marítimos, la presencia internacional de Panamá en temas de seguridad de buques tiene que ser mucho más grande de lo que tenemos ahora. “Tenemos que demostrarle al mundo que como registro número uno tenemos las condiciones de ofrecer el servicio completo”, enfatizó.
Sin embargo, la permanencia de Panamá como líder del registro abierto de buques va a depender del empeño y esfuerzo que haga el Estado de recuperar la relevancia de este tema, aseguró Guillermo Márquez Amado, abogado especialista en derecho marítimo y exdirector de Marina Mercante.
A Panamá le tomará entre uno a dos años poder salir de la lista gris del MOU de París; en cuanto a este escenario, la presidente de la CMP indicó que las decisiones en torno a este tema deben ser inmediatas para tener respuesta de aquí a un año.
Carreira recordó que la inclusión en la lista gris del MOU de París afecta al país, porque la actividad naviera panameña es cuestionada por falta de reglamentos y ejercicios sobre el cumplimiento de una cantidad de requisitos de vigilancia sobre temas de lavado de dinero, terrorismo, corrupción y otros temas relacionados con la lista.
Anotó que todo esto se debe a que el servicio de la Marina Mercante panameña “no es el más eficiente” porque no está alcanzado los estándares internacionales, tras las irregularidades que ha presentado ese sistema desde hace tiempo.
“Creo que eso requiere un esfuerzo mucho más serio por parte de nosotros, porque la navegación internacional tiene sus propios estándares establecidos. Hay que tomar en cuenta que Panamá ha sido beneficiado en el aspecto económico del registro de buques, pero se conforma con los pocos servicios que brinda, que al final hace que su seguridad sea cuestionada”, subrayó el abogado especialista en temas marítimos.
Agregó que el anuncio de la AMP de continuar un proceso de depuración de su flota mercante en pro del cumplimiento internacional solo demostró “la deficiencia del registro panameño” ante la falta de transparencia que solo obstruye el acceso de información sobre la forma en cómo se manejaba el registro de buques.
“La AMP no es nada distinta del gobierno central, entonces, creo que por eso es que tenemos estos cuestionamientos, porque no tenemos realmente esa concepción de que nuestras acciones traen estas repercusiones y que el registro de barcos es mucho más que ponerle la placa al bus y venderle la licencia al chofer, que es lo que hacemos, y cobramos dinero por eso”, denunció Carreira.
“Yo creo que tenemos que hacer mucho más que lanzar un comunicado como el que publicó la AMP. El tema para mí es que no hay la apertura ni el manejo de la información. Creo que hay alguna amplitud para mejorar el sistema, pero esto requiere una decisión sería desde el punto de vista gubernamental, que es lo que definitivamente falta”, añadió.
Pese a las circunstancias, el exdirector de la Marina Mercante señaló que Panamá cuenta con las ventajas para no perder la hegemonía dentro del registro de buques, sin embargo, dijo, debe ser consciente de que está antes un servicio que se presta en un mundo competitivo global donde hay diferentes naciones que han privatizado sus servicios.
Mencionó que hay que estar claro que el país no debe privatizar sus servicios porque “es una de sus grandes fortalezas”, ya que en lo que debe trabajar es en ser más eficiente y abierto, pero sí más estricto en temas de seguridad y en corrupción.
“Panamá se caracteriza por ser precisamente un servicio que no es privado como lo son otros competidores, como Iberia. Sin embargo, hay que reconocer que ellos sí prestan un servicio más rápido y eficiente del que nosotros hacemos, pero eso no quiere decir que no podamos seguir siendo un servicio estatal”, puntualizó Márquez Amado.
“A veces nos falta iniciativa y creatividad para resolver los problemas simples y siempre en todos los casos tenemos que tener una supervisión estricta (como la de MOU París) para evitar caer en temas de corrupción que nos ha hecho tanto daño”, añadió.
Carreira también visualizó que la inclusión de la lista gris exige que Panamá cumpla con los estándares que tienen que ver con el tema societario, de la propiedad, de seguridad, impuestos internacionales y prevención de lavado de dinero.
Hasta el momento es difícil cuantificar las pérdidas económicas que puede sufrir Panamá si comienza a perder registro de buques. No obstante, el exdirector de la Marina Mercante justificó que esto se debe a que los ingresos que se obtienen provienen de diferentes orígenes, como los servicios de abogados, servicios consulares, de impuestos, de tasas, registro, hipoteca, título de propiedad, traducción, por mencionar algunos.
La hegemonía de Panamá dentro de los próximos años es otro de los temas discutidos. Al respecto, Carreira indicó que perder el liderazgo no es números, ya que si se observa la cantidad de barcos y toneladas que hay en el registro de buques no se puede perder en un periodo tan corto. “La peor manera en que podamos perder el registro de buques es que no crezcamos o no logremos que las naves que se están construyendo actualmente opten por el registro panameño, por eso debemos tener una agresividad mucho más grande en brindar servicios de calidad”, manifestó.
La presidente de la CMP recalcó que estos problemas no deben recaer en una institución o administración, porque son temas con responsabilidad de país. También comentó que la inclusión en la lista gris más que una debilidad debe ser vista como la oportunidad para que el sistema de registro de buques mejore su infraestructura, tanto administrativa como logística.
“Siempre hay crisis y oportunidades. Quizás el momento de esta falencia que tenemos a nivel internacional nos lleva a fortalecernos más entre las instituciones y los gremios para unir esfuerzos y sacar a Panamá de esa lista”, concluyó Poyser.
La Autoridad Marítima de Panamá emitió este martes un comunicado donde reseña las razones por las que el registro de buques fue incluido en la lista gris de MOU de París:
Edad de la flota heredada operando en esta área: de las 374 detenciones reportadas (en los últimos tres años), tenemos 104 naves de más de 30 años, 35 naves de más de 40 años, situación que nos pone en riesgo dada la rigurosidad de las inspecciones en este MOU. Estas naves están siendo sujetas a un régimen de inspecciones especiales, y si no mejoran serán depuradas del registro.
Se detectó la tendencia de naves certificadas por organizaciones reconocidas con un alto número de detenciones o con deficiencias reportadas y que tienen certificación técnica válida a bordo, sin previa notificación a la Dirección General de Marina Mercante. Estas empresas han sido auditadas, algunas suspendidas y no se descarta la revocación de su delegación de autoridad.
La situación económica generada por la pandemia ocasionó que algunas empresas se declararan en quiebra y abandonaran sus buques y tripulantes.
Detectamos que las inspecciones de estado de abanderamiento llevadas a cabo por los inspectores aprobados, no estaban arrojando los resultados esperados, incluso se detectaron casos donde los inspectores no asistían a bordo de las naves y han realizado inspecciones remotas actuando en independencia y sin la autorización de la Dirección General de Marina Mercante.
En la nota, la AMP justificó que el Registro de Buques de Panamá tiene alrededor de 8.500 naves y ha sido inspeccionadas al menos 45.000 veces lo que da un nivel de cumplimiento general de la flota del 96,17%, y una rata de detenciones del 3,83% hacia la baja.
“Para esta administración, la captación de naves de nueva construcción, la debida diligencia y la aceptación de naves que provengan de empresas con altos estándares ha sido un compromiso para posicionar a Panamá en el sitial correspondiente. De hecho hemos logrado captar 1.548 naves de nueva construcción y más o menos 50 millones de toneladas en los últimos 4 años, siendo un dato muy importante para la sostenibilidad del Registro”, detalló la entidad.