• 19/09/2022 00:00

Competencia y sostenibilidad

El objetivo de la normativa de competencia es promover y proteger la competencia efectiva en los mercados y lograr resultados eficientes en beneficio de los consumidores

En el mundo actual hay una marcada tendencia a considerar las preocupaciones ambientales y sociales en los procesos de desarrollo económico, lo cual ha mejorado el objetivo de crecimiento económico, convirtiéndolo en crecimiento económico socialmente inclusivo y ambientalmente sostenible.

La Resolución 70/1 de la Asamblea General de las Naciones Unidas "Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible", (2015) marca un hito, en el que se presentan los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) como metas en los ámbitos medioambiental, social y económico, a alcanzar en el año 2030. Estos objetivos han sido tomados en cuenta en las estrategias nacionales posicionándose en las agendas políticas a nivel global.

Por otro lado, el objetivo de la normativa de competencia es promover y proteger la competencia efectiva en los mercados y lograr resultados eficientes en beneficio de los consumidores.

En el sector de energía, la Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (Acodeco) vigila y da seguimiento al comportamiento de los mercados. Los consumidores deben jugar un papel activo, garantizando un acceso a opciones energéticas sostenibles, promoviendo y supervisando el autoconsumo.

En este sentido, en Panamá existe la Ley 37 de 10 de junio de 2013, “Que establece el régimen de incentivos para el fomento de la construcción, operación y mantenimiento de centrales y/o instalaciones solares”, así como la Ley 38 de 9 de agosto de 2016 “Que modifica y adiciona disposiciones a la Ley 37 de 2013”, y la Ley 295 de 25 de abril de 2022, “Que incentiva la movilidad eléctrica en el transporte terrestre”, que comenzará a regir el año fiscal siguiente a su promulgación. Todas estas normativas, aunadas a que tanto los consumidores como los agentes económicos se empoderen e inviertan en productos para la producción de energía sostenible y movilidad eléctrica, harán de Panamá un mejor país, más eficiente y amigable con la naturaleza.

En Panamá, ya se ha establecido en el mercado una importante variedad de empresas dedicadas a la instalación de plantas fotovoltaicas para residencias y empresas que compiten, y más recientemente, se observa la comercialización de vehículos híbridos y 100% eléctricos entrando al mercado nacional, dinamizando la competencia y haciendo más eficientes a los hogares y a las empresas que ofrecen sus bienes y servicios a los consumidores en general.

La banca ya financia este tipo de proyectos y un ejemplo de ello es la oferta que hace la Caja de Ahorros, con “préstamos verdes” para la instalación de paneles solares y para la compra de autos ecológicos, con condiciones muy favorables para que sus clientes opten por este tipo de proyectos que benefician no solo a la economía familiar y nacional, sino también al medio ambiente, nuestro planeta.

Exhortamos a los consumidores ir sumándose a este tipo de inversiones, que mejoran el presupuesto familiar y contribuyen en reducir la huella de carbono para frenar el cambio climático; y a las empresas que podrán ser más eficientes, reduciendo costos operativos en sus diversos procesos, pudiendo hacerse más competitivas para ofrecer mejores productos a menores precios.

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