Hormigón Express, una concretera con propósito medioambietal

Hormigón Express, una empresa panameña dedicada a la producción de concreto, recibió recientemente una certificación internacional otorgada por el Consejo de Sostenibilidad del Concreto, por sus operaciones en materia de responsabilidad ambiental.

Luego de que Hormigón Express cumpliera con el sistema global de certificación de abastecimiento, diseñado para apoyar y promover en las compañías operaciones equilibradas y comprometidas con la protección del ambiente, el consejo concedió esta distinción a la concretera istmeña.

“El proceso de reconocimiento se hizo desde España. Hormigón Express es una de las primeras en ser certificadas en la industria del concreto local. Demostrar nuestro proceso de sostenibilidad en la industria fue una labor bastante profunda que abarcó mucha documentación. Esta premiación es nueva ya que se lanzó el año pasado”, expone Alfredo Fonseca, su fundador. “Nos sentimos orgullosos de que una empresa del territorio nacional haya logrado obtener este premio. En toda América Latina, este mérito solo lo han recibido Colombia y Guatemala, además de Panamá”.

Hormigón Express y Cemex son las dos únicas empresas que operan en Panamá con esta certificación internacional.

Este reconocimiento cuenta con el respaldo de la Federación Iberoamericana del Hormigón Premezclado, una organización sin fines de lucro que agrupa a diversas asociaciones nacionales y empresas sobresalientes en la región, dedicadas a este producto.

Un total de 22 empresas globales están afiliadas al Consejo de Sostenibilidad del Concreto, que ha otorgado 123 certificados por sus buenas prácticas en la visión de construir un futuro sostenible. Hormigón Express, gracias a su compromiso por minimizar el impacto ambiental a través del abastecimiento responsable fue merecedora de la certificación.

Los fundadores de la compañía concretera, el ingeniero Alfredo Fonseca Mora y el ingeniero Robert Zauner concuerdan en que la certificación del Consejo de Sostenibilidad del Concreto es un mérito que confirma la responsabilidad de su compañía enfocada en la transparencia en la industria del concreto.

Acción

Con 20 años en el mercado panameño, la empresa productora de concreto ha desarrollado sus operaciones en la línea de la sostenibilidad ambiental, social y económica. “La industria del concreto en Panamá, desde sus inicios, ha estado enfocada en la responsabilidad y a medida que fueron transcurriendo los años más empresas se sumaron al sector”, subraya Fonseca.

Hormigón comenzó a operar en el año 2000 bajo el lema de responsabilidad empresarial. En poco tiempo de haber iniciado su producción, logró certificarse por sus buenas prácticas.

En 2006, acogió la certificación de sistemas de gestión de la calidad ISO 9001.

Las empresas que son acreedoras al ISO deben demostrar su capacidad para ofrecer a sus clientes productos y servicios eficientes que satisfagan sus necesidades. A su lista se sumaron dos reconocimientos ISO. La certificación 14001, que está relacionada a los sistemas de gestión ambiental. Posteriormente, Hormigón obtuvo la ISO 45001 de sistemas de gestión de la seguridad y salud, que entró en vigor en marzo de 2018.

“Cada dos años nos toca recertificarnos y gracias a nuestros controles y equipo de trabajo hemos seguido vigentes con estas certificaciones. La calidad de nuestros productos y servicios es estable en el tiempo. Hemos tratado de elevar el nivel de la compañía en materia de entregas y otros aspectos, para impactar positivamente a nuestros clientes y nuestro entorno”, sostiene Fonseca.

En esa línea de las buenas prácticas y seguir implementando la visión de construir un futuro sostenible, Fonseca manifiesta que uno de sus sueños es utilizar combustible orgánico dentro de sus operaciones, pero la pandemia ha retrasado la posibilidad de continuar llevado a cabo este plan piloto.

En tanto, Zauner también fundador de Hormigón señala que reutilizar el agua y no usar la de los sistemas existentes, así como instalar filtros a los carros para que las emisiones de gases sean mínimas, son parte de las acciones que integran la guía de sostenibilidad. “Implementar estos mecanismos en la operatividad no es complicado. Solo se requiere incorporarlos gradualmente para llegar a la meta de un mundo mejor”.

Con relación al tema, Fonseca hace un llamado a las empresas concreteras en el istmo a que se sumen a estas prácticas que buscan resguardar el ecosistema. “Esperamos que más compañías en Panamá hagan este tipo de implementaciones a favor del medio ambiente. En cuanto a Hormigón, esperamos seguir ubicando los puntos para minimizar el impacto en el medio ambiente. Reitero que ser una de las primeras empresas locales en obtener la certificación en sostenibilidad nos llena de satisfacción”, afirma.

Aspectos como el calentamiento global y la contaminación en diversas áreas es lo que ha despertado en Fonseca su sentido de lucha y conciencia ambiental. “Un aspecto importante es que un producto que es responsable con el medio ambiente aumenta su valor, pero ¿la sociedad panameña estará dispuesta a pagar por estos productos? Si queremos un Panamá mejor para las futuras generaciones, tenemos que ser responsables en todos los sentidos”.

En ese contexto, manifiesta que las compañías existentes del sector construcción “deben replicar las buenas prácticas efectuadas en otros países en pro de conservar el medio ambiente manteniendo un buen nivel de competitividad en el mercado”.

Afectación

Fonseca anota que el sector de la construcción ya venía golpeado desde 2018, 2019 y con el nuevo coronavirus la situación se agravó. “2020 fue un desastre. No tiene sentido que este sector se paralizara por seis meses; en otros países no ocurrió un cierre prolongado”.

La covid-19 no ha dado tregua y aunque en este 2021 algunos negocios se han enfocado en la reactivación económica, las restricciones sanitarias han hecho que las dificultades se acentúen. “El recobro en el sector de la construcción será lento. Tenemos al 70% de nuestro personal suspendido. El daño que se ha ocasionado es profundo, ya que muchos de los que tienen contratos en suspensión no podrán retornar a sus puestos de trabajo”.

Antes del confinamiento masivo en marzo de 2020, el volumen de ventas de acuerdo con los propietarios de la empresa concretera era estable por lo que les permitía tener a su personal operando, no obstante, hoy el escenario es distinto. “Lastimosamente no podemos contratar más personal. El reto ahora es volver a los niveles que teníamos antes de esta pandemia”.

Para Fonseca lo primordial es mantener a las empresas funcionando con los niveles de producción requeridos, pese a que la demanda de concreto se ha reducido drásticamente. “Nuestro objetivo es que la empresa siga operando y una vez que volvamos a la normalidad, contratar más personal”.

“Al final del camino, debemos continuar. Desde que abrimos parcialmente en agosto de 2020, hemos tenido muy pocos casos de contagios por el SARS-CoV-2, es decir que estamos haciendo las cosas bien y estamos tomando las precauciones necesarias”, comparte Zauner.