El Centro de Cultura de Colón, alternativa para sus héroes deportivos

Actualizado
  • 24/07/2023 00:00
Creado
  • 24/07/2023 00:00
El Centro de Bellas Artes e Industrias Culturales que se construye en la provincia, tiene un 50% de avance. Pero en él no hay espacio para el deporte
Las antiguas instalaciones del colegio Abel Bravo albergarán el Centro de Bellas Artes e Industrias Culturales.

Colón ha soñado toda la vida en contar con un lugar especial para colocar los nombres de aquellos que, de alguna u otra forma, la han enaltecido en el campo del deporte.

No es un tema ajeno a otras regiones del país, porque en todas han existido y existen deportistas con talento y hojas de vida memorables, y es por ello que se ha insistido en la creación de un salón de la fama o un museo del deporte.

Desde los tiempos de Panamá Al Brown a principios del siglo XX, pasando por Lloyd LaBeach, Carlota Gooden, Diva Bishop, Rod Carew y Roberto Durán, hasta llegar a Mariano Rivera e Irving Saladino en la nueva centuria, siempre hemos contado con un héroe deportivo con visos internacionales.

No obstante, jamás se ha podido concretar la idea de tener un lugar, donde propios y extraños conozcan un poco sobre nuestra historia, la mayoría desconocidas porque en los centros educativos, el lugar adecuado para enseñarlas, no hay tiempo para 'estas nimiedades'.

Las instalaciones mantendrán la antigua capilla , que se ubica entre los talleres del colegio.

Los educadores físicos apenas tienen el tiempo para enseñar teorías sobre ciertos deportes, como les obliga el programa que se les entrega anualmente de parte de un casi inexistente Departamento de Educación Física del Ministerio de Educación.

El asunto en cuestión cobró vida hace algunos años, cuando el Instituto de Deportes construyó la Ciudad Deportiva y planteó el asunto, pero se acabaron los espacios y jamás fue concretado.

Luego en este quinquenio se volvió a retomar el tema en forma más concreta, cuando varios diputados impulsaron un anteproyecto de ley para la creación del salón de la fama y el museo del deporte.

Una vez más el asunto fue tratado como un tema de muy pocas pasiones, a pesar de que nuestro país además de conocerse por la vía interoceánica, es reconocido por las destacadas actuaciones de sus atletas.

La reconstrucción permitirá el uso de todos los espacios del antiguo colegio.

Lo cierto es que aún el documento flota en la comisión de Cultura y Deportes de la Asamblea, sin llegar a determinarse si algún día se le dará el visto bueno en segundo debate y, de esta manera, contar con un argumento jurídico sobre la materia.

Centro de Arte y Cultura

También durante esta administración se habló en 2020 de la posibilidad de construir un centro cultural de bellas artes, en el antiguo edificio que albergaba el colegio Abel Bravo, a un lado de la Zona Libre de Colón.

Hoy, el Centro de Bellas Artes e Industrias Culturales tiene un avance aproximado del 50% y se construye a un costo cercano a los 30 millones de dólares, por parte del Ministerio de Cultura.

El espacio que ocupaba el gimnasio del colegio, ahora será utilizado como auditorio para unas 300 personas.

El sitio, ubicado muy cerca al puerto de cruceros Colón 2000 y de donde se construye el estadio de béisbol, es visto como un lugar apropiado para albergar en uno de sus pabellones algo de la rica historia deportiva de la provincia.

Se construye en un área aproximada a los 20 mil metros cuadrados y la estructura del antiguo Abel Bravo, forma parte del patrimonio histórico dentro del casco de la ciudad de Colón.

Es posible que desde su idea original jamás se pensó hablar sobre el particular, principalmente, porque se cree que es un tema que le concierne exclusivamente al Instituto de Deportes, y así se observa en un documento donde se reparten los diferentes salones.

En uno de sus pabellones se ubicaría la escuela de danza; en otro, los talleres de la escuela de artes plásticas y salones teóricos de las escuelas artísticas; y en un tercero, la escuela de gastronomía y salones de práctica y de talleres de las escuelas de música y teatro.

También tendría un espacio para los escritores, para las artes plásticas infantil y un auditorio, antiguo gimnasio Claudia Lowe, para unas 300 personas.

En conclusión, nada para el deporte, a pesar de que es parte de la cultura, la idiosincrasia y el ser de una provincia, y sabemos que las actuales autoridades de cultura están conscientes de ello.

Un pabellón deportivo

En uno de los tantos sitios que existen sobre el tema, se dice que: “La actividad deportiva, al igual que el resto de elementos que configuran el paradigma cultural, es un reflejo de los aspectos socioculturales propios de la sociedad en la que se desarrolla”.

“El deporte contiene mucha información sobre la sociedad, puesto que supone un elemento no solamente lúdico, sino también cultural, político, económico, científico y social”, agrega.

Por esto y muchas otras razones, porque las mismas sobran, es que se hace imperativo que el Ministerio de Cultura reevalúe el asunto, buscando la posibilidad de que, en uno de los pisos, por lo menos, de los pabellones existentes, se ubique parte de la historia deportiva colonense.

No solamente sería un acto de justicia con una provincia que es dueña, siendo reservado, de más del 40% de la historia deportiva panameña, sino una decisión que sería aplaudida por siempre.

Ahora bien. Nosotros apenas somos una golondrina, por lo que debe ser la misma sociedad deportiva colonense que haga la petición, que siembre la inquietud para que, como señalamos, el tema tenga suficientes argumentos que amerite una evaluación.

En esa línea, hace un par de años se dio una iniciativa para que el centro, conocido en ese momento como Centro de Bellas Artes, llevara el nombre del fallecido jugador de baloncesto colonense, Pedro 'Mago' Rivas.

Esta iniciativa, tenemos entendido, se elevó y entregó al entonces ministro de Cultura, Carlos Aguilar, conjuntamente con un pliego firmado por decenas personas en apoyo a la petición.

Los creadores de la idea, entendieron que la cultura y el deporte van de la mano, por lo que no era descabellado llevarla adelante.

Otro detalle. Revisando el documento sobre la gestión primaria del Centro Cultural, además del tema del deporte, no vemos espacios otorgados para la muestra del folclore local, de su historia e idiosincrasia.

Es posible que el documento en cuestión es de los primeros que se gestionaron y hoy, están previstos otros aspectos que en un principio no fueron tomados en cuenta, como es el caso del deporte.

La familia colonense anhela un lugar para sus glorias deportivas y tal vez ese centro cultural no sea la solución a tan inmensa gestión, pero se convertiría en un oasis en medio de tantos desaciertos con esta golpeada provincia.

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