Wiggins, el elegido como el número uno

La selección de jugadores para los equipos de la NBA no deparó mayores sorpresas, salvo que los Cavaliers de Cleveland finalmente se decidieron a escoger al mejor fichaje disponible para sus intereses.

Con un nuevo técnico y algo de perspectivas positivas para armar un equipo competitivo, Cleveland eligió a Andrew Wiggins de Kansas como el primer jugador en ser seleccionado en el draft de la NBA.

Decidieron quedarse con un estudiante canadiense de primer año para inaugurar el draft por segundo año consecutivo y esperan que Wiggins les funcione mejor que Anthony Bennett, su primera selección del año pasado, que ni siquiera fue capaz de alcanzar su plenitud, tal vez por una errada visión de sus potenciales en el juego.

Wiggins, en cambio, luce como un jugador con mejores perspectivas, a juzgar por los 17.1 puntos que tuvo como promedio en su único año como jugador universitario.

Uno que tuvo que esperar un poco para conseguir equipo fue Doug McDermontt, un versátil jugador que estará con los Nuggets como el undécimo pique de la primera ronda.

Los Lakers de los Ángeles depositaron sus esperanzas en el pivot Julius Randle, un jugador que podría hacer olvidar a Dwight Howard y a Andrew Bynum muy pronto, a juzgar por sus números.

Randle mide 6-9 pies y pesa 250 libras; llegó a las finales de la NCAA tras promediar 15 puntos y 10 rebotes por juego.

Por su lado, los campeones de San Antonio agregaron el talento de Kyle Anderson, un talento escondido del que se hablará mucho.