Raíces afropanameñas con tinta de arte y orgullo

Actualizado
  • 25/06/2020 20:45
Creado
  • 25/06/2020 20:45
La creatividad no se detiene por la pandemia. Melany Allen, artista visual panameña, tomó sus raíces y experiencias como afrodescendiente para plasmarlas en nuevos diseños originales y accesibles a una población con sed de cultura
Algunos de sus temas en diseños hacen alusión a la cotidianidad del panameño, representado por jóvenes afrodescendientes.

En una de las calles de Pedregal, en la ciudad de Panamá, hay un pequeño taller casero donde el arte fluye sin restricciones, y la inspiración creativa es la invitada permanente; así, la pintora y artista visual Melany Allen convierte sus ideas en piezas que transmiten el orgullo de sus raíces afropanameñas y su pasión por la cultura nacional.

Allen, de 24 años, decidió aprovechar el tiempo en casa brindado por el confinamiento para planificar su nuevo proyecto: una serie de diseños con identidad afro plasmados en suéteres y camisetas para sus seguidores en Instagram. “La idea de tener mi arte en una prenda accesible que las personas pudiesen lucir, me viene acompañando desde mis comienzos en la pintura, hace ya ocho años”, comenta a La Estrella de Panamá. “Poseer, a partir de mis diseños, toda una línea de ropa deviene en un sueño que comienza a tornarse realidad”, dice.

Para la artista, dedicarse a crear su nuevo proyecto en redes sociales fue un llamado a dar importancia al arte nacional de todas las maneras en que se manifieste. “Crear no es solo hacer algo bello; crear es vivir, es transformar, es ser”, expresó, “aprendí que cada obra tiene su esencia y que mi propio estilo está en todas. Mis piezas hablan de lo que soy, represento, lo que vivo y veo diariamente”.

Tras inyectar su identidad como parte de la comunidad afropanameña, el desarrollo del mensaje tras cada pieza fue adquiriendo sentido, como señaló: “Para mí, es importante que el arte represente y hable claramente de lo que piensa y cree el artista, aunque eso en algunos casos pueda significar ir contra la corriente. Mantenernos fieles a nuestra propia expresión artística tiene un valor incalculable”.

Pero el arte no es lo único que utilizó la joven emprendedora para su negocio virtual, sino también sus conocimientos como publicista profesional y aplicaciones en Instagram, algo que considera pieza clave en el nuevo esquema de emprendedurismo: “Estamos en tiempos en que las personas se adaptan a una era totalmente digital, lo que es una oportunidad para empezar cualquier negocio no físico y mostrar tus creaciones”, dijo, “las redes sociales, en mi caso, sirvieron como ventana o portafolio para exponer ideas y atraer al público panameño a ellas”.

Su colección cuenta actualmente con cuatro diseños, para hombre y mujer, en el que se destacan frases criollas del panameño, con un estilo fresco y juvenil que atrae a cientos de nuevos seguidores a su cuenta personal (que a la vez ha migrado a ser de negocio): @lissethallenv. Entre amarillos, verdes, rosas y naranjas –además del color moreno de sus personajes–, los diseños evocan un sentido de pertenencia istmeña con el que Allen desea que se identifiquen sus clientes y amigos.

La joven llama “inspiración” a aquellas ráfagas de ideas que aparecen dentro de sí luego de largos días de trabajo. “Como creadora no poseo un proceso propiamente definido o único, me gusta mucho delinear mis bocetos en esos instantes de calma que nos ofrece la vida, a veces en algún viaje al trabajo o después de una charla interesante”, indicó, “y en esta cuarentena he encontrado muchas otras formas de sobrellevar el caos e inspirarme”.

“El ocio nos abre una brecha para crear y planificar todo lo que normalmente se nos hace complicado, pero eso no es todo, ya que ningún proceso de creación está completo sin un buen respaldo: un libro, una serie, la música, entre otros”, aseguró.

La artista visual panameña, Melany Allen.

Y es la planificación el factor primordial que abraza la artista en medio de la cuarentena, la cual la ha alejado de otro de sus proyectos: IntegrArte, fundado en septiembre de 2019 y dedicado a desarrollar talleres en las escuelas y fundaciones e impulsar la integración del arte en la educación, como explicó Allen, quien es su directora creativa.

“El primer taller fue realizado con Casa Esperanza, pero lastimosamente, debido al distanciamiento por la pandemia, se han tenido que posponer todas las grandes actividades”, enfatizó la artista, “es un proyecto muy prometedor y que va a continuar una vez que la situación epidémica lo permita”.

Aún así, Allen vuelca sus esfuerzos en continuar su pasión por la pintura y expandir su arte con la clientela que recibe. “Ha sido difícil conseguir pintura en estos momentos, pero no me detengo, pese a que lo más difícil ha sido sacar el presupuesto para dicho emprendimiento, y más en este tiempo donde la gente siempre está a la espera de buenos precios”, señaló.

La emprendedora agradece el apoyo a quienes le tendieron la mano desde sus inicios: “Mis amigos de @Annaprovenca, que son las personas que han estado desde el primer día ayudándome con la creación de los suéteres; y a mi madre, América Valdespino, quien me ha motivado sin descanso”.

Un llamado

Pasional, divertida y, sobre todo, creativa es como se describe Allen, que busca dedicarse a la pintura para fortalecer y fomentar la integración del arte en la educación panameña para el futuro de nuevas generaciones, y a su vez, inspirar a otros artistas a seguir sus ideales de negocios sin prestar atención a las dificultades que se presenten en el camino.

Así mismo, Allen señala la importancia de que el sector público y privado dirija su mirada a las nuevas promesas del arte en diversas aristas: “El hecho de no contar con organizaciones que apoyen e inviertan en el talento local, provoca que miles y miles de ideas mueran diariamente por falta de apoyo y ejecución. Es importante tener un lugar donde los nuevos talentos o emprendedores puedan instruirse y obtener los conocimientos necesarios para sus proyectos o empresas”.

Allen ha puesto en planes tener una tienda en línea –o con un establecimiento físico en el futuro–, mientras continúa recibiendo apoyo a través de las redes sociales con una clientela cautiva.

Con la mirada fija en lo positivo del presente y el futuro, Allen hace un llamado de atención a los artistas que, como ella, usan su pasión para aportar a la cultura panameña, así como a las industrias creativas: “Con inversión, estudio y organizaciones, pilares necesarios para aumentar el apoyo hacia las pymes en Panamá, se podrá ayudar a impulsar las propuestas innovadoras de los jóvenes”.

“Y a mis colegas les digo que este tiempo, más que una limitante, debe percibirse como una puerta abierta para nosotros, nuestras ideas, y a la introspección para crear, expresarnos y dejar que el resto se libere gracias al arte”, concluyó.

En las diligencias de allanamiento que se recuperaron armas de fuego con permiso vigente, pero no registradas a nombre de los involucrados, sino de sus...

Lo Nuevo
Suscribirte a las notificaciones