El cruel negocio de las pieles

El negocio de las pieles para hacer ropa de invierno aún persiste en varios países del mundo, ya que son pocos los que han acogido leyes que sancionen esta práctica. Cada año, unos 20 millones de animales mueren víctimas de trampas utilizadas para cazarlos por sus pieles, mientras que unos 40 millones son criados en granjas exclusivamente para ese negocio, reconoce la organización iberoamericana AnimaNaturalis, la cual defiende los derechos de los animales.

Según la organización internacional que lleva años luchando por los derechos de los animales, el maltrato que hay detrás de estas fábricas de pieles es atroz. “Son vidas arrebatadas por un lujo egoísta”, afirman.

“Lo peor que le puede pasar a cualquier animal silvestre es que se le produzca sufrimiento de forma intencionada, se le manipule genéticamente, se le trate como si fuese un animal doméstico para posteriormente asesinarlo y, en muchos casos, causar la extinción de la especie”, redacta AnimaNaturalis en su sitio oficial.

La industria peletera (dedicada a la elaboración de indumentaria, cuero y piel animal) es responsable de la generación de residuos y de la introducción en el medio natural de especies no autóctonas. Todo ello para satisfacer una supuesta necesidad de prendas de abrigo, totalmente innecesarias, y los imperativos de una moda anticuada y repudiada por la mayoría de la población, aclara.

La captura y muerte de animales salvajes con fines peleteros ha llevado durante los últimos siglos a la extinción de especies como al zorro de las Malvinas y los visones (Neovison vison), los cuales están en peligro crítico actualmente. A otras muchas las ha puesto al borde de la desaparición como el castor, el ocelote, la pantera nebulosa, la nutria marina, el tigre, el jaguar, las focas, el koala, las ovejas, los conejos e incluso el gusano de seda.

En España, la caza de animales por su piel supuso la extinción de la garduña de Ibiza y ha puesto, junto con otras causas, a múltiples especies al borde de la extinción. La nutria ha sido perseguida por su piel hasta la década de 1960, cuando empezó a escasear tanto que dejó de ser rentable. El oso pardo sigue siendo cazado furtivamente por su piel.

Según los organismos de protección animal, la peletería no es solo sinónimo de muerte, también lo es de sufrimiento. En el caso de animales en libertad, su muerte se produce especialmente mediante la utilización de trampas conocidas como cepos. Estos métodos no causan la muerte del animal de forma rápida, sino que alargan el sufrimiento. La muerte termina produciéndose tras largo tiempo de agonía.

El conejo de angora es una variedad originaria de Turquía que se cría por su pelo, la lana de angora, aunque actualmente el mayor productor es China. Su abundante pelaje es objeto de explotación económica debido a que las prendas confeccionadas con este tipo de fibra pesan menos que la lana y dan mucho más abrigo. La angora es un tejido de alta calidad que se encuentra en innumerables prendas de vestir.

La piel de zorro es muy estimada en peletería, dado que su suave pelaje es realmente impactante y dependiendo de las razas, los hay en diferentes colores. Pero es necesario sacrificar de 18 a 20 ejemplares para poder fabricar un abrigo.

Los castores tienen una piel muy resistente e impermeable, porque son mamíferos que viven prácticamente toda su vida en el agua. Por ello, los abrigos confeccionados con su piel son muy apreciados, pero cada uno le cuesta la vida a 9 animales. Animales sacrificados para hacer ropa, detalla el sitio Ecoticias.

Ante esta realidad, en 2021, Israel se convirtió en el primer país a nivel del mundo en adoptar una legislación en la lucha contra el comercio de pieles para la moda.

El comercio de pieles, importación y exportación, quedará prohibido salvo cuando se haga por necesidades de investigación, enseñanza y algunas tradiciones religiosas, afirmó en un comunicado el ministerio de ese país en 2021.

De esta forma, el reglamento tendrá una excepción con motivo religioso: el uso para la confección del 'schtreimel', un sombrero de piel de animal que llevan algunos judíos ultraortodoxos, seguirá estando autorizado.

Gila Gamliel, ministra de medio ambiente, afirmó en la nota que la industria del comercio de pieles provoca unos sufrimientos inimaginables a los animales y este decreto transformará el mercado de la moda israelí, mejorándolo en el ámbito del respeto.

Ya en 2019 California se había convertido en el primer estado de Estados Unidos en prohibir la venta y distribución de ropa hecha con pieles. La nueva ley denominada AB44, que entrará en vigor en 2023, se aplicará a las prendas de vestir, bolsos, zapatos, zapatillas, sombreros, o llaveros que contengan pieles. La ley, además, convierte el estado en el tercero en prohibir a la mayoría de los animales en las actuaciones de circo, según una publicación de ABC.

Gavin Newsom, gobernador de California, posteó en Twitter ese año: “Acabo de firmar una de las leyes de derechos de los animales más fuertes en la historia de Estados Unidos, haciendo de California el primer estado de la nación en prohibir la venta de pieles nuevas”.

Recientemente el Parlamento de Estonia aprobó un proyecto de ley que declara ilegal la cría de pieles a partir del 1 de enero de 2026.

El ayuntamiento de Ann Arbor, Michigan, Estados Unidos votó 10 a 0 para prohibir la venta de pieles desde agosto de 2021, lo que la convierte en la primera ciudad del medio oeste en prohibir la venta de productos nuevos de piel.

En abril de 2022, Plymouth, Massachusetts, Estados Unidos, se convirtió en la cuarta comunidad del estado de la bahía en votar a favor de prohibir la venta minorista de productos nuevos de piel, luego de las prohibiciones de pieles en Brookline, Wellesley y Weston. Y en junio de 2022, Bulgaria instituyó una prohibición parcial, poniendo fin a los criaderos de pieles de visón en ese país.

Borislav Sandov, viceprimer ministro de Políticas Climáticas y ministro de Medio Ambiente y Agua de Bulgaria, anunció la prohibición de la cría y la importación de visones estadounidenses en todo el país. La prohibición cerrará el último criadero de pieles de visón que queda en el país para fin de este año. Esta victoria llega después de años de actividades de parte de las entidades de PETA (una de las organizaciones defensora de los derechos de los animales más conocida en el mundo) para apoyar la prohibición de las granjas de pieles en el país.

En Panamá solo hay leyes que defienden a los animales domésticos –ya sea por maltrato u otra situación–, mas no por venta de piel animal. No son muchas las especies animales utilizadas para estos fines.

De acuerdo con información del Ministerio de Ambiente (MiAmbiente), no hay evidencia o casos de exportación o tráfico ilegal de piel animal en el país.

“El único caso de exportación es de la piel de cocodrilo y es de manera legal, ya que existe un zoocriadero que tiene los permisos adecuados para este negocio, pero, no hay registros de algún caso de venta de piel animal de forma ilegal reciente, “esos datos no los tenemos”, dijo a este medio un vocero de protección animal de MiAmbiente.

Con todo este progreso, es claro que usar a los animales para vender sus pieles es algo que ya no debería de pasar, pero el negocio al ser rentable se sigue dando y los organismos urgen a las instituciones ambientales gubernamentales a que presten atención al tema y se logre erradicar esa práctica lo antes posible.