Luchas ejemplares

El mundo está en turbulencia, con incertidumbres pronunciadas, aturdido por la desinformación continua y buscando soluciones. Algunas organizaciones ejemplares aportan relevantes enseñanzas. Entre ellos, los siguientes que se sintetizan.

El pequeño Bután es actualmente un país de referencia para el orbe entero. No lo es porque contenga minerales estratégicos ni riquezas petroleras ni armas perfeccionadas. Tiene solamente 750 mil habitantes y está enclavado entre los dos países más poblados del mundo: India (2400 millones) y China (2300 millones). Está ubicado en la cordillera del Himalaya. Es de acceso muy difícil; tiene un solo aeropuerto. Está empeñado en una de las luchas más difíciles que ha liberado el ser humano: construir una sociedad plenamente feliz.

Es el creador de una tabla para medir el grado en que las políticas públicas que aplica generan o reducen el producto bruto de felicidad (PBF). Entre sus búsquedas fundamentales se hayan: el cuidado perfecto de la naturaleza y su disfrute a pleno; el desarrollo de una vida comunitaria armoniosa; el cultivo a fondo de la espiritualidad; la práctica diaria de la cultura.

Es una sociedad sencilla, campesina, sin distancias sociales. Era un reinado, pero el rey que la transformó resolvió dimitir para convertirla en un reinado parlamentario, donde el órgano principal de decisión reside en un congreso electivo y en el funcionamiento de una democracia perfeccionada.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) la invitó a referir su caso ante la asamblea general para mostrar que era posible y que el PBF crecía continuamente. Se ha generalizado como referencia. También ha aumentado significativamente el turismo para conocerlo de cerca. Su cielo es perfecto y no hay contaminación alguna.

En 1844 se crearon las primeras cooperativas alimentarias. Hoy practican el cooperativismo mil millones de personas, en la búsqueda de mejorar la vida y avanzar ideales morales y hacerlo en fraternidad. Actualmente hay más de 3 millones de cooperativas (2023). Emplean el 12 % de la mano de obra mundial. Producen el 10 % del producto bruto mundial.

Están presentes en campos críticos para la población. Van desde las cooperativas de crédito que apoyan especialmente a las pequeñas y medianas empresas (pymes), pasando por las cooperativas escolares, las de salud, las agrarias, las alimentarias, las de provisión de servicios colectivos en municipios, de agua, electricidad y muchas otras. Están presentes en numerosos países, desde Estados Unidos, los países nórdicos. en los cuales son un pilar de la economía, y en Europa y América Latina.

Una de las mayores es el reputado Valle de Mondragón en España, que cuenta con 83 cooperativas, algunas de ellas altamente tecnificadas y que inciden significativamente en la producción nacional.

Un ejemplo de cuán importante puede ser el cooperativismo es la centenaria cooperativa obrera de Bahía Blanca (Argentina). Tiene 30 mil miembros y se ha convertido en el principal distribuidor de productos alimentarios saludables. Sus importantes resultados hicieron que se crearan más de 80 filiales de dicha cooperativa en el sur del país.

El poder de decisión en las cooperativas lo tienen los miembros; se reúnen en asambleas periódicas para ejércelo, pedir cuentas y designar a las juntas de administración.

En Finlandia, líder en tecnologías y en educación, hay más cooperativistas que habitantes; la razón es explicable. La gran mayoría de los finlandeses integran varias cooperativas.

15 cooperativas de mujeres mayas crearon una organización para el reciclaje integral de residuos y preservar puras las aguas del lago sagrado de Guatemala, una joya sagrada de la naturaleza del país.

Hay muchos otros ejemplos de luchas para redimir el mundo. Deben tener el máximo apoyo colectivo.