¿En qué se me va la plata?

Luz, agua, eventos, alquileres, deudas bancarias, impuestos... una vez definidas las prioridades y cómo ahorrar, pareciera que está todo cubierto, y es aquí donde encontramos fallas en el presupuesto que hemos hecho con aparente detalle, porque en realidad se dejan pasar gastos más y gastos menos.

Todos contabilizamos lo que ganamos, pero nos ponemos poco realistas sobre lo que gastamos, y a menudo es esa falta de precisión la que echa a perder nuestros planes.

Según la etapa de la vida en la que nos encontremos, los gastos son distintos, pero algunos se mantienen fijos; y a menudo desconocemos los gastos que son ineludibles, pero que terminan por vaciar nuestros ahorros y hacer fracasar nuestros planes de futuro... si no pensamos en ellos.

En un país como Panamá, sobre todo en sus ciudades principales, los gastos de transporte deben ser obligatoriamente considerados, ya que no se suele vivir cerca de las zonas de trabajo.

La comida es un ítem que no requiere de mucha explicación, es posible decidir comer en casa en lugar de un restaurante; es ser realista respecto a tu estilo de vida y apetito.

Entretenimiento, mantenimiento corporal, vivienda, salud, seguros, gastos esporádicos, podríamos ampliar cada detalle... pero la razón de esta columna es concienciar sobre la revisión de tu comportamiento financieros, y darte estos consejos:

- Ahorra todos los meses un porcentaje de tu salario o ingresos.

- Compara precios antes de comprar.

- Ahorra mensualmente para gastos esporádicos.

- Paga todos los meses tus tarjetas de crédito.

- Sigue los consejos de expertos en finanzas.

- Si tienes una hipoteca, procura pagarla antes de tiempo.

Espero que llegues a fin de mes, y no cuentes los días; procura que cada día cuente para poder ahorrar.

Hasta la próxima.