La historia de Halloween

Probablemente sea una de las fiestas paganas más discutidas, estudiadas, criticadas, debatidas y practicadas en la historia de la humanidad, y como tal, está llena de simbologías que, en su mayoría, quienes la celebran desconocen su génesis y razón de ser.

En algunos países latinoamericanos, como Panamá, pese a no ser parte de su idiosincrasia y cultura prehispánica (ya que es una fiesta puramente anglosajona) es igual de comercializada, celebrada y explotada, sin embargo, le preguntas a una persona en la calle, ¿qué significa?, ¿por qué la calabaza es uno de sus símbolos?, ¿de dónde viene?, ¿qué significa la palabra 'bruja'?, ¿por qué se celebra el 31 de octubre? y ¿por qué los niños se disfrazan y piden dulces para no hacer trucos? Casi nadie lo puede responder satisfactoriamente.

Hagamos un viaje para explicar desde su simbología y génesis hasta sus variantes comerciales... Partamos por su nombre “Halloween” que viene del inglés “All Hallows Evening” o sea víspera de todos los santos.

Una teoría sostiene que muchas tradiciones de Halloween pueden haber sido influenciadas por los antiguos festivales de cosecha celtas, particularmente el festival gaélico Samhain; algunos eruditos sostienen que puede ser el resultado del sincretismo causado por la cristianización del Samhain junto a las vísperas de la Iglesia católica de los primeros siglos. Otros académicos creen, sin embargo, que Halloween comenzó únicamente como una fiesta cristiana, siendo la vigilia del Día de Todos los Santos.

¿Qué es Samhain? Era el señor de la muerte y su nombre significa literalmente “el fin del verano”, es por ello que la calaverita es uno de sus símbolos, y en el caso de México, predomina en su festividad más hermosa llamada el Día de los Muertos, donde venden pan de muertos, las familias pasan la noche en los cementerios y hay calaveritas coloridas... es más, hasta Pixar hizo una película llamada “Coco” basada en esta festividad.

Cuando los romanos conquistan a los celtas, la festividad se abrió camino por Europa, ya que Roma dominaba casi en su totalidad el continente y, aunque ya se celebraba en los últimos días de octubre y primeros de noviembre una festividad conocida como la “fiesta de la cosecha”, en honor a Pomona (diosa de los árboles frutales), se mezclaron ambas tradiciones.

Dado que Halloween coincide con la temporada de la cosecha anual de manzanas, estas se caramelizan y se reparten a los niños; hoy son dulces de todo tipo (tradición gringa).

En Irlanda, por ejemplo, se preparan pasteles de frutas en los que se coloca un anillo simple, una moneda y otros encantos antes de hornear. Se dice que aquellos que encuentran un anillo, encontrarán su verdadero amor el año siguiente. Esta tradición es similar a la del roscón de Reyes en la fiesta de la Epifanía, símbolo que muchos tampoco saben explicar cuando se les pregunta el porqué o si tiene que haber rosca en Navidad.

Otra tradición Irlandesa que tomó fuerza fue la de tallar nabos para hacerlos lámparas, en alusión a la leyenda de Jack o' Lantern. La historia en cuestión es que un hombre llamado Jack hizo un pacto con el diablo que salió mal y se vio condenado a rondar las noches iluminando su camino con un trozo de carbón incandescente dentro de un nabo con agujeros, así que los campesinos irlandeses empezaron a cargar estas “linternas de Jack” por las aldeas y las dejaban encendidas frente a las casas en la noche de Halloween para ahuyentar a los malos espíritus. Cuando llegan a Estados Unidos, el nabo, al ser muy difícil de encontrar, es reemplazado por la calabaza.

¿Y la brujita? Todas las culturas de la humanidad desde sus inicios han tenido una estrecha relación con la magia y, en realidad, era percibida como algo bastante positivo, ya que las mujeres que eran tipificadas como tal, eran muy respetadas y consideradas sabias; de hecho, la palabra brujería significa “sabiduría”. En inglés, el significado de la palabra witch es interesante, pues es una conjunción entre las palabras wise y woman, que juntas significan “mujer sabia”.

En Italia, por ejemplo, quien lleva los regalos a los niños en Navidad no es papá Noel o Santa Claus, sino una brujita llamada Befana. Su nombre deriva de la palabra Epifanía y es por ello que esta festividad religiosa está unida a su imagen, siendo su figura folclórica más representativa en diciembre. ¿Por qué vuelan en escobas? Una bruja que volaba simbolizaba a un ser que lograba despojarse de todas sus limitantes para trascender a niveles superiores con el paso de los años.

A raíz de la Inquisición, en el siglo XV y XVII, en Europa y América, principalmente, se llevó a cabo la denominada caza de brujas, una época en donde muchas personas, principalmente mujeres, fueron ejecutadas por la Iglesia en la horca o muertas en la hoguera tras ser acusadas. En nuestros días, esto es considerado una barbarie, pues como la historia de las Brujas de Salem nos enseñó, muchas fueron acusadas y condenadas injustamente. ¿Por qué? Porque el hombre por naturaleza teme a lo que no entiende.

Ahora bien, es también indiscutible que esta fiesta pagana ha sido desvirtuada y que se cometen crímenes horrendos e inimaginables en su nombre, tanto en contra de la Iglesia como en contra del bienestar de otras personas. Y lo que se lleva a cabo en esos ritos satánicos y de magia negra, nada, repito, absolutamente nada tiene que ver con el origen de esta festividad como tal. Sin embargo, es un tema muy delicado de tocar.

Celebrarlo o no es algo que se lo dejo a su criterio, amigo lector. Lo que sí es cuestionable, es tomar parte de esta u otra festividad desconociendo su génesis y razón de ser, y sobre todo, de sus simbologías. De hacerlo, estaríamos cayendo en la ignorancia popular del “lo hago porque todos lo hacen” y sería regresar a ese mundo del oscurantismo que tanto le ha costado a la humanidad (aún hoy) superar.