- 26/02/2012 01:00
- 26/02/2012 01:00
En estos últimos años la infraestructura de la ciudad de Panamá sufrió cambios notables. El paisaje urbano es radicalmente distinto. El desarrollo, el aumento de habitantes, nuevas necesidades con viejas estructuras, son ideas y posiciones que dejan su huella en el material que conforma y moldea nuestra ciudad.
Los proyectos son muchos: la Cinta Costera, el muelle fiscal, la renovación de Curundú y la comunidad de San Sebastián, entre los innumerables rascacielos que se elevan sin mucha planificación pero con determinación. Y se espera la ampliación del Canal, el nuevo metro y algunas modificaciones al aeropuerto de Howard.
Cada época deja su marca en la ciudad. Por cada barrio podemos conocer y aprender un poco de nuestra historia. Allí, también, podrán observar en el futuro la manera de concebir al país, y a nosotros mismos, que impera hoy. Sería bueno pensar qué le diremos de nosotros mismos a nuestros nietos: ¿que somos un país desarrollado? ¿Que ésta fue la época de las más significativas obras urbanas? ¿Que el país atraviesa un crecimiento celebrado? ¿Que queremos conservar lo nuestro y crecer igual?